Lenín Moreno, de 64 años, juró este miércoles el cargo como presidente de Ecuador para el período 2017-2021 en una ceremonia en la Asamblea Nacional ante la presencia de cientos de invitados ecuatorianos y mandatarios extranjeros.
“Sí juro”, respondió escuetamente Moreno ante la pregunta del presidente de la Asamblea Nacional, el oficialista José Serrano, quien le tomó el juramento y declaró que queda así posesionado como Presidente del país.
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El público estalló en aplausos al grito de “¡Lenín, Lenín!”, poco antes de que el expresidente Rafael Correa le impusiera la banda presidencial. Correa abrazó a Moreno tras colocársela y, posteriormente, ambos y Serrano saludaron al público desde el centro del escenario principal de la sede de la Asamblea Nacional.
Moreno hizo su primer discurso como gobernante destacando la unidad de su nación dentro del respeto a la diversidad. “Todos somos hechos del mismo Ecuador y compartimos el aire y oxígeno con nuestros hermanos”, dijo Moreno, en el que agregó: “Somos uno y somos todos, somos diversos, venimos de una misma historia”.
La Asamblea Nacional de Quito es el escenario, este miércoles, del traspaso de poderes entre Rafael Correa y Lenín Moreno, quien se impuso el pasado 2 de abril en la segunda vuelta de las elecciones al conservador Guillermo Lasso.
El nuevo presidente ecuatoriano, licenciado en administración de empresas, reemplaza a Correa tras más 10 años de gestión en las que priorizó la construcción de grandes obras de infraestructura, hospitales y escuelas para los más pobres, pero también fue criticado por sus avances sobre los derechos civiles. Moreno dejó la vicepresidencia en 2013 para asumir como enviado especial de las Naciones Unidas para las personas con discapacidad.
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Después del juramento de Moreno, Serrano tomó juramento al vicepresidente Jorge Glas Espinel, que repite mandato.