Porque no llegaron los testigos de cargo, fue pospuesto el juicio que en el Juzgado Local Único de El Tuma-La Dalia enfrentaría este martes 6 de junio la defensora de derechos humanos, Thelma Francisca Suárez Olivas, acusada junto a tres familiares suyos por presunta obstrucción de funciones en perjuicio del capitán de la Policía, Rolando José Ortega.
Tres policías, incluyendo a Ortega, además de un taxista del poblado de El Tuma, son los testigos propuestos por la Fiscalía en el proceso Contra Suárez. Ninguno llegó y la juez Rosalpina Obando Orozco reprogramó la audiencia de juicio para el 13 de junio próximo.
Ortega habría justificado que tenía que servir de testigo en otro proceso judicial en Matagalpa.
En tanto, Jairo Antonio Gurdián Mendoza, de 27 años, pareja de Suárez, además de José Raúl Martínez Paiz, de 38 y el hijo de este, José Ángel Martínez Suárez, de 19, acusados junto a la defensora de derechos humanos, comparecieron al Juzgado.
“Los cuatro acusados venimos al juzgado pero ya van dos veces que lo van reprogramando pero ellos sabrán por qué lo están haciendo, aunque ellos están bien claros que los agredidos fuimos nosotros”, dijo Suárez.
Según la acusación, a las 11:00 a.m. del Viernes Santo, 14 de abril, Gerald Alexander Martínez Suárez —hijo de Suárez y miembro del Ejército— con una piedra presuntamente quebró el vidrio delantero de un taxi con placa MT 23379 que, en el poblado de El Tuma, conducía Lesly Gutiérrez Lara; mientras que Gurdián, usando unos chacos (arma tradicional de las artes marciales asiáticas), habría golpeado la parte trasera del vehículo.
Una patrulla policial conducida por el teniente Leonel Castro y en la que también iban el capitán Ortega y el policía Elías Briones, pasaba por el sitio. Los uniformados intervinieron y esposaron a Gerald; sin embargo, los cuatro acusados pretendieron impedir el arresto “de manera violenta”, refiere la acusación.
Gurdián presuntamente golpeó con los chacos a Ortega y Briones; mientras que Suárez se habría lanzado a sujetar el fusil que portaba Briones, pretendiendo desarmarle; al tiempo que Martínez Paiz jalaba a Gerald y José Ángel, con machete, quería agredir a los uniformados, por lo que Briones realizó disparos preventivos.
Sin embargo, Suárez insiste en que esa versión es falsa y con los otros tres acusados se presentan una vez por semana en el Juzgado, cumpliendo con la medida cautelar que les impuso la juez en la audiencia inicial celebrada el 27 de abril.
“No nos vamos a correr y vamos a demostrar la inocencia de nosotros porque no tenemos delito en contra de nadie”, aseguró Suárez.
Es la segunda vez que el juicio es pospuesto. Inicialmente fue programado para el 18 de mayo pero, a petición de la Fiscalía, fue reprogramado para este 6 junio y en esta ocasión no llegaron los testigos de cargo.