En el mundo hay más de 200 países, pero solo hay cuatro colores de pasaporte: rojo, azul, verde y negro. ¿Se ha preguntado a qué se debe esto? Pues según una publicación del diario El Mundo, no existe un protocolo internacional sobre los colores y su elección puede ser antojadiza, pero los cuatro escogidos —casi siempre de tonos oscuros y formales— corresponden a aspectos políticos: el rojo es de los países de la Unión Europea como Francia, Italia, España, y naciones que desean adherirse como Turquía. También países no europeos lo usan, como Mongolia.
El azul corresponde al “nuevo mundo”, según indica El Mundo. “Es el color de los países miembros del Mercosur (excepto Bolivia), de las naciones caribeñas (Cuba, Barbados, Bahamas), de Norteamérica (Estados Unidos y Canadá) y el de Australia”.
El verde suele ser usado por países musulmanes como Arabia Saudita, Marruecos o Mauritania.
Y por último, el negro lo han tomado países de África subsahariana como Zambia, Congo, Chad o Burundi, pero también lo usan Nueva Zelanda y Palestina.
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