Hasta la tarde del miércoles seguía en el misterio la ubicación del barco Miss Johana Betsey desaparecido con 13 tripulantes en el Mar Caribe, desde el 29 de junio.
Y aunque en los alrededores de Cayos Perlas unos pescadores encontraron 30 nasas y un bolso, según el propietario del barco, Eduardo Zeledón, no les sirve de mucha ayuda, pues no estaba la ropa que hubiera sido de utilidad porque los familiares podrían reconocer si se trataba de alguno de ellos, pues “hay muchos bolsos iguales”.
“Y eso es lo que nos tiene sin pistas”, indicó Zeledón, vía telefónica, quien explicó que la Fuerza Naval desplegó ayer tres guardacostas y tres pangas con las cuales bordeaban desde Monkey Point, San Juan del Sur hasta los Cayos de Managuar.
En la búsqueda participarían buzos y también Zeledón mantenía sus embarcaciones en el área.
“Pero ahorita el mar está un poco picado, la ola está alta, y hay mucha corriente y el agua está sucia, entonces los buzos tuvieron que regresar a Corn Island”, explicó Zeledón.
El propietario de la embarcación expuso que los familiares de los marineros han cuestionado que con el naufragio de los ciudadanos costarricenses en enero del año pasado, el Ejército de inmediato sobrevoló la zona.
Y aunque en horas de la mañana el propietario del barco, Eduardo Zeledón había conocido que la Fuerza Aérea se integraría a la búsqueda, desconocía si al final algún helicóptero fue enviado al sector de Corn Island.
“El helicóptero, no se sabe en verdad, como estamos acá en Bluefields, no se sabe si lo mandaron a Corn Island y esa es la inquietud y la angustia que tienen los familiares, de que el gobierno es verdad que ha apoyado, pero le ha hecho falta con los helicópteros”, dijo Zeledón.
Tras una reunión con autoridades militares locales, Zeledón había conocido que la Fuerza Aérea se integraría este miércoles a la búsqueda que realizaban en un radio de diez millas del sitio donde el pasado 29 de junio recibieron la última señal de la baliza satelital que fue a once millas de la Isla Pequeña del Maíz, en un sector conocido como El Quiebre.
“Están buscando en todo, no solo donde fue la última transmisión de la baliza, sino sondeando toda el área costera en un radio de diez millas de la última ubicación”, explicó Zeledón.
“Yo tengo once años de estar en este negocio y nunca nunca había tenido una mala experiencia”, comentó el dueño de Miss Johana Betsey.
Para el dueño del barco desaparecido es raro que no hayan indicios de naufragio.
“Usted sabe que de haber un naufragio, hay barriles en los barcos, hay mecates que flotan, los mismos salvavidas salen a flotes y no se encontraron más rastros”, afirmó Zeledón quien insistió en que tampoco han detectado residuos de combustible y aceite.
También le llama la atención que según la esposa del capitán del barco, este se comunicó con ella a eso de las 9:45 p.m., a 9:50 p.m, y le dijo que todo estaba bien y la baliza dejó de marcar a las 10:00 p.m., de ese jueves y en esa zona donde marcó la baliza por última vez emprendieron la buscó todo el día siguiente, “después se peinó la zona sur, zona este y norte, que es para donde la corriente tira cualquier objeto y nada que ver”.
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