En la anterior administración municipal de Managua, el entonces concejal Luciano García propuso que se ampliara el cauce Oriental y luego se sellara, pero tal recomendación fue ignorada y es hasta este año que las autoridades de la Alcaldía lo contemplan, coincidiendo con el reciente hecho que un vehículo se precipitó al sistema de drenaje y murieron dos personas.
Las sugerencias de García se basaron en dos aspectos: primero que al taparlo se ganaría espacio en un tramo considerable de la pista Juan Pablo II y se podría aprovechar para construir parques, zona peatonal o estacionamientos; y segundo que brindaría seguridad en la ciudadanía al evitar que alguna persona se fuera.
“En varias sesiones del Concejo Municipal yo les dije que debían sellar los cauces, que era una medida de seguridad porque ahí (en el sector de El Dorado) se han muerto niños. Ahí es donde había más problemas, yo les dije que debían ensancharlo y sellarlo”, recordó García.
Pero es hasta este año que la comuna anunció el desarrollo de tales obras y es porque rehabilitarán los 9.55 kilómetros de la pista Juan Pablo II, un proyecto cuyo costo es de 255 millones de dólares y su ejecución será de tres años.