El mejor lugar del mundo es nuestra casa. Por eso, cada detalle debe ser elegido de manera cuidadosa. Hoy en día hay opciones variadas para cada elemento que la compone, entre ellos los pisos, que van desde caucho hasta concreto, pasando por la madera entre otros materiales y acabados. Aquí te mostramos una lista de opciones y cómo cuidar de ellos.
Cerámica y porcelanatos
Existe una basta variedad y son muy populares, siendo una de las alternativas favoritas para construcciones modernas y vanguardistas. Pueden usarse tanto en espacios interiores como exteriores. Los pisos de cerámica son higiénicos, resistentes, ecológicos y están en continua evolución. Han imitado las texturas de madera, piedra y concreto. “Han evolucionado bastante, ya que sus brillantes y coloridos acabados aportan luz, color y calidez a los espacios”, dice Osiris Sequeira, experta en acabados de Sinsa. En cambio el porcelanato es resistente, ideal para zonas de alto tráfico y áreas comunes como sala, comedor, baño y cocina.
De madera
Proyectan elegancia y calidez en los ambientes y son ideales para colocarlos en habitaciones, estudios, áreas sociales y pasillos. Los colores van desde los más claros hasta los marrones más oscuros. La resistencia de este material depende del proceso de secado, explica Sequeira.
Por su parte Nello Canton, gerente general de Tepsa, explica que la madera requiere de un cuidado especial debido a que la pueden afectar plagas como el comején. Es necesario retocarlos cada dos años con un sellador.
Piedras naturales
Según los expertos hace algunos años el uso de piedras naturales era exclusivo para exteriores, pero hoy en día, con las nuevas tendencias en decoración de interiores, se ha incluido en los interiores, con el objetivo de distinguir áreas específicas. Cuenta con una variedad de colores y texturas, además da una apariencia de poder y solidez, resistente a las agresiones, desgaste y tráfico.
A base de cemento
Este tipo de pisos se dividen en hidráulicos, térmicos y vibrados. Cualquiera de ellos tiene una vida útil de 100 años a más, explica Ronald Cajina, gerente de Conipisos.
Entre las ventajas de este material están su resistencia, durabilidad, no contienen plomo por lo que son amigables con el medioambiente y la salud de las personas. En dependencia de la línea, son antideslizantes, térmicos es decir que no se calientan, hay una variedad en diseños, su grosor es más amplio en comparación a los de un material diferente, lo que permite que se puedan reestructurar.
Cuidado de los pisos
Se deben limpiar con los químicos adecuados, como desengrasantes amigables con el medioambiente, dice Nello Canton, gerente general de Tepsa.
El cloro es uno de los químicos que se debe evitar para pisos de cualquier material, ya que les quita el color, esmalte y se opacan.
Se debe dar una limpieza intensiva cada seis meses o una vez al año. Si es una área abierta como una escuela o un centro comercial lo más recomendable es una vez a la semana.
Los pisos de madera deben ser fumigados regularmente para evitar plagas de comején.
Entre más grande es la pieza del piso menor es el foco de contaminación y suciedad.