La situación económica de Nicaragua
Actualmente muchas encuestadoras, periodistas, politólogos y economistas están centrados en cabildear la opinión que tienen los nicaragüenses, poniendo énfasis en algunos estratos de población entre los cuales hay más exigencias como son la clase media y alta (considerando que la clase baja es más subsidiada y atendida a través de programas sociales del Gobierno) y manifiestamente en la mayoría de los casos, el mayor porcentaje de opinión y percepción que tienen las muestras tomadas indican que la economía del país ha mejorado.
Una encuesta particular realizada por algunos medios refleja que los nicaragüenses que viven en el extranjero, también en su mayoría, aseguran que Nicaragua tiene índices de crecimiento económico con mejores números, hasta el punto que hay una importante inversión en pequeños y medianos negocios por parte de estos, como una clara señal de que están pensando en su retiro y regreso al país para vivir de sus inversiones, negocios o pequeñas empresas en este país.
Pero aun así, según las teorías de desarrollo y la teoría de las crisis, revelan que las economías en desarrollo son susceptibles a ciertos cambios y pueden caer en recesión o estanflación, principalmente por los efectos que tiene el exceso de consumo y la disminución del ahorro, así mismo el exceso de oferta y endeudamiento como resultados de los créditos no orientados a la producción y a la inversión.
Algunos economistas critican al sistema financiero del país, por favorecer y direccionar los créditos con mayor facilidad y a menor tasa de interés para bienes de consumo, principalmente a la compra de automóviles, motocicletas, electrodomésticos y en otros casos para vivienda y los créditos para la producción son mucho más altos y con menos flexibilidad a la hora de realizar el trámite de esos créditos, poniendo en alerta y en albur el proceso de desarrollo y la sostenibilidad de la economía en un período mediano y largo plazo.
Una clara señal es que la masa vehicular en Nicaragua aumentó en alrededor de cien mil automotores, entre automóviles y motocicletas, superando las expectativas, por tanto, los medios y mecanismos para que esa masa vehicular se mantenga funcionando y circulando debe aumentar, entre ellos la producción y la inversión, mejorar la productividad, para lograr equilibrar el exceso de consumo con la generación de ingresos.
Dado lo antes mencionado, las fluctuaciones económicas y las probabilidades de desequilibrios exógenos provocados por situaciones políticas y financieras, sin contar con los casos fortuitos que pueden suceder, hay que preparar y sugerir políticas microeconómicas y macroeconómicas encaminadas a prever y solventar estos problemas económicos e ir equilibrando las cargas en el transcurso del año fiscal.
José Alfredo Montenegro.
Tipos de fanáticos
En todos los sectores de la humanidad existen los fanáticos o personas que defienden una “creencia o una opinión con pasión exagerada y sin respetar las creencias y opiniones de los demás”. Eso lo hemos visto en los juegos de beisbol pero más aún en los juegos de futbol internacional.
E incluso, también he visto a nicaragüenses que hasta un infarto les ha dado porque su equipo de futbol, del cual son fanáticos, ganó el juego o una Copa mundial, y que los miembros de este equipo de futbol ni lo conocen.
Hasta ahí llegan los fanáticos, pero también existen los fanáticos partidarios de un partido político y eso los vemos en Nicaragua. En los años ochenta había un montón de fanáticos sandinistas que viendo cómo la dictadura sandinista los mataba de hambre y los enviaba como carne de cañón a una guerra, entre los mismos nicaragüenses apoyaban y votaban por esa dictadura.
Hoy existen otros fanáticos sandinistas que en tres períodos de gobierno de Daniel Ortega, no tienen ni un medio empleo ni qué comer, y que se encuentran en extrema pobreza, sin ninguna esperanza ni futuro; sin embargo, siguen apoyando y votando por el partido y gobierno sandinista.
Ese tipo de fanáticos los vimos el domingo pasado votando a favor de la Constituyente en Venezuela, mientras el dictador Nicolás Maduro los está matando de hambre, sus fanáticos siguen apoyando esa dictadura. Qué triste ¿verdad? Dios quiera que un día los fanáticos de uno y otro lado despierten y podamos cambiar el rumbo de las naciones pisoteadas, muriendo de hambre por esos dictadores.
Máximo M. Castillo (mexicano).
Ilegalidad autorizada
Qué frustrante para los nicaragüenses amantes de la democracia observar cómo cualquier ciudadano que cae en la ilegalidad apela a su fidelidad política para que las personas a quienes idolatra autoricen esa condición, aun a costas de la inestabilidad y perjuicio de la ciudadanía que cumple con las reglas.
Estoy seguro que nuestra vicepresidenta, primera dama, secretaria del Consejo de Comunicación, vocera de todos los ministerios estatales y alcaldesa de los municipios con administración oficialista se regocija al ver cómo un grupo de taxistas no autorizados para operar en León organizan romerías con sus fotografías para venerarla y pedirle que les permita seguir operando en esa ciudad, aduciendo que ellos también tienen derecho a trabajar.
El trabajo es un derecho de todo ser humano, pero hasta este acto dignificante tiene que realizarse siguiendo ciertas reglas. No nos podemos amparar en la necesidad o en el derecho al trabajo para realizar acciones que ocasionan daño a las demás personas y en ciertas ocasiones privan al Estado de una de sus principales fuentes de financiamiento, como son los impuestos.
Desgraciadamente en el país, el Gobierno actual se ha aprovechado de la falta de empleo formal para incentivar las actividades económicas por cuenta propia, lo que se refleja en la súbita aparición de pequeños negocios que se ubican en cualquier parte de las ciudades trastornando la circulación de peatones y de vehículos, provocando el aumento de la basura y generando una competencia desleal a los comerciantes ubicados en los mercados y en los locales acondicionados para albergarlos, donde además pagan su arrendamiento.
El populismo con el derecho a la subsistencia ha llegado a tal grado que cuando los comerciantes y concesionarios afectados por la competencia desleal, los peatones y dueños de vehículos afectados por la imposibilidad de transitar por ciertas calles, y los dueños de casas a quienes se les bloquea su ingreso por la colocación de estos negocios piden una solución a los alcaldes, estos responden con la gastada frase: “Todo mundo tiene derecho a trabajar” o con la genial respuesta que dio la vicealcaldesa de Estelí, al aconsejar a los comerciantes que pagan grandes sumas por alquiler de sus módulos: “Brinden una mejor atención a sus clientes, porque la Alcaldía seguirá promoviendo las ferias para ayudar a estos compañeros”.
Y cuando un alcalde decide implementar nuevas reglas en su municipio, los afectados ya saben a quién acudir y su santa patrona no les fallará. Los enviará con su Fidel servidor, quien les autorizará en su nombre seguir con la ilegalidad.
Irónico, pero cierto. Recuerde que vivimos en Nicaragua y aquí lo ilegal está autorizado para los seguidores de la pareja real.
Francisco Javier Gutiérrez Lagos.
