La escasez de saneamiento y agua potable en la zona rural causa un problema que pasa desapercibido y es que las niñas adolescentes durante su periodo de menstruación se ausentan de clases porque no tiene un lugar donde ir a cambiarse, señaló Rosa Angélica Sáenz, representante del programa de Ingeniería para el Desarrollo (Ongawa), en Nicaragua.
“De acuerdo con un diagnóstico que hemos hecho con las escuelas rurales logramos ver que hay una serie de mitos y creencias vinculadas a este tema, inclusive vemos que muchas niñas sufren bullying cuando sus compañeros de clase se dan cuenta que andan con su periodo, por eso uno de los resultados revela que más niñas se ausentan, primero porque tienen miedo que se les pase la sangre en sus ropa y se burlen de ella y segundo porque no hay condiciones en las escuelas”, explica Sáenz.
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Requieren de atención
La Organización Mundial de la Salud (OMS) revela que se debe mantener la salud de las niñas adolescentes, lo cual requiere una respuesta amplia en la sociedad y en primer instancia en el sector sanitario.
Sáenz revela que hay muchos retos en la práctica de la higiene menstrual desde el punto de vista de las niñas adolescentes, maestros, compañeros de clase y madres.
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“Esto está ligado a factores socioculturales de las comunidades y escuelas en la zona rural, la falta de capacitación sobre el manejo de la higiene menstrual, el entendimiento biológico de la menstruación, las instalaciones escolares inadecuadas y el acceso limitado a toallas sanitarias”, dijo Sáenz.
Niñas adolescentes desorientadas
Hizo énfasis que desde las casas se vive una desorientación, pues las madres cuando se enteran que su hija menstruo le dicen:“cuando te bañes no te laves tus partes íntimas porque te puede entrar hielo y luego eso te va a causar dolor, lo que conocemos como cólico menstrual, o le dicen no se acerquen a los niños porque pueden quedar embarazadas, todo eso son mitos que afectan a las niñas”.
Saneamiento e higiene
La Organización Mundial de la Salud (OMS) da a conocer que el acceso a servicios de agua, saneamiento e higiene podría evitar que muchas personas sufran enfermedades.
Asimismo la OMS estima que la falta de saneamiento contribuye a gastos de 260 mil millones de dólares anuales por muertes, enfermedad y pérdida de productividad.
Además calcula que 1,800 millones de personas usan fuentes de agua contaminada con heces fecales, a causa de la defecación al aire libre y que 2,500 millones de personas no tienen acceso a un saneamiento adecuado.