Manfredo Marroquín ha trabajado por años en temas de transparencia en Guatemala. Es presidente de Acción Ciudadana, capítulo guatemalteco de Transparencia Internacional y formó parte de un grupo de la sociedad civil que por tres años cabildeó ante tres distintos gobiernos para pedirle a las Naciones Unidas la Comisión Internacional contra la Impunidad (Cicig), que hoy tiene en jaque mate al tradicional y corrupto sistema político de ese país.
En esta entrevista Marroquín, quien también se desempeña en Guatemala como analista político, explica por qué la ciudadanía de su país protesta y exige cambios a los políticos, el trabajo de la Cicig y lanza una advertencia: las viejas estructuras de poder político y económico ya no podrán seguir haciendo sus negocios impunemente.
¿Qué está pasando en Guatemala, nosotros vemos en las noticias que los guatemaltecos están volcados en las calles exigiendo cambios?
Lo que pasó en Guatemala es que hay acompañamiento de la Comisión Internacional contra la Impunidad (Cicig), que fue exigida por los mismos guatemaltecos, no fue ninguna imposición ni ninguna injerencia sino que fue solicitada y diseñada desde Guatemala para que acompañara en los casos de investigación criminal relacionados con grupos de poder que no eran investigados por la institucionalidad de nuestro país, lo que pasó es que ese poder de investigación independiente (la Cicig) ahora ha descubierto lo que todos nosotros sabíamos que existía pero con pruebas, que la corrupción llega al más alto nivel del Estado y que permea a todo el estado, a todos los niveles y obviamente eso ha hecho estremecer a todo el poder, tanto político como económico… Teníamos un órgano que estaba adormecido, como el de la investigación criminal, ahora pone contra las cuerdas al sistema que estaba muy acomodado, gozaba de mucha impunidad… la gente está sintiendo que no le llegan los servicios de salud, educación, infraestructura… pues dice ahora ¿cómo van a allegar los servicios si todo se lo están robando? la gente hizo clic de que la corrupción existe y que es el motor de la política lamentablemente en Guatemala y eso ha hecho que la gente diga ya no queremos más este sistema y queremos otro que reemplace al actual.
¿Cómo pueden valorar el papel de la Cicig y el del comisionado Iván Velásquez que es quien ha estado en el tapete en los últimos meses?
La Cicig es un experimento a nivel mundial, no existe otro caso igual, es un ejercicio en el que el país sí cede su soberanía, porque en todo los países es potestad del Ministerio Público hacer la investigación criminal y en este caso Guatemala cedió parte de esa soberanía, porque lo demandó el mismo país, nosotros fuimos a Naciones Unidas a pedirlo porque queríamos ensayar algo nuevo, porque históricamente teníamos una institución designada para esa tarea que no era eficiente. El comisionado Velásquez, quien es el tercero de la Cicig, traía la experiencia de Colombia, un país muy parecido a Guatemala con una historia de violencia, inseguridad, de redes mafiosas y yo creo que para él fue muy fácil leer lo que estaba pasando en Guatemala y por eso fue el más efectivo, de hecho, el anterior comisionado era un exfiscal de Costa Rica, muy bueno como profesional, como investigador, pero de él decían: bueno viene de Costa Rica que es una piscina y aquí es un pantano y hay que saber nadar en pantanos, entonces creo que Velásquez se acomodó muy rápido, comprendió rápido la realidad y eso lo hizo apuntar a objetivos y casos grandes, peses gordos, yo creo que el papel de la Cicig se va a leer en la historia a partir del trabajo de Iván Velásquez en la Cicig.
El presidente Jimmy Morales llegó al poder con un eslogan: ni corrupto ni ladrón y aprovechando una crisis y el desprestigio de los políticos tradicionales y ahora vemos que él está salpicado por la corrupción ¿Cómo puede interpretarse eso?
Su falta de entendimiento de lo que estaba pasando en el país lo hizo caer en los mismos vicios y prácticas que hicieron caer al anterior gobierno. El anterior gobierno se estaba cayendo y él estaba entrando en política haciendo exactamente lo mismo: recibiendo dinero de manera anómala, no lo registró, no lo reportó y el día de hoy él está acusado de financiamiento ilícito, yo creo que su gobierno lejos de reconocer sus errores más bien se alió con las fuerzas que se sienten perseguidas por la Cicig, tanto políticas como económicas y hoy están haciendo un frente para frenar el ímpetu de la Cicig, para frenar lo que la ciudadanía está demandando, pero estoy seguro que no van a tener ningún éxito, su batalla está perdida.
Lea también: Congreso de Guatemala blinda a Jimmy Morales ante delitos electorales
En Guatemala funciona un Poder Judicial —aun con todos sus errores— y una Fiscalía independiente, para una organización como ustedes que trabajan los temas de transparencia ¿qué significa eso?
Nosotros tuvimos que recurrir a la Cicig para recobrar a nuestro órgano que es el Ministerio Público y que comenzara a despertar, a dar resultados y sacar adelante casos que antes no sacaba porque estaba coaptado… Ya no tenemos retorno, la gente tiene claro que el poder político se teje a través de negocios, de redes políticas y económicas que usufructúan el Estado para hacer grandes negocios, obviamente eso la gente lo resiente… y tiene explicación de por qué como país no salimos a delante. El activo más importante en Guatemala es la ciudadanía consciente que finalmente dijo hasta aquí a la corrupción.
¿Por qué vemos que en Guatemala la gente sale a protestar contra la corrupción, contra los políticos y no pasa lo mismo en otros países, qué es lo diferente en Guatemala?
Lo diferente en Guatemala es alguien que lo puso al descubierto, que lo evidenció con pruebas contundentes, grabaciones, hay grabaciones del presidente (anterior Otto Pérez Molina) hablando con una red de defraudación tributaria, dando órdenes, cuando la gente mira, oye… la gente cree.
Miramos que en Guatemala hay un grupo de medios, encabezados por los que maneja el señor Ángel González, pugnando y buscando la salida de la Cicig
Hay poderes muy bien orquestados y fuertes, política y económicamente, que ven esto como el fin de sus negocios, el fin de sus paraísos de impunidad en donde podías hacer millonarios negocios y estar tranquilos, yo creo que están viendo acabarse sus paraísos y obviamente están dando la batalla ellos también, como la gente está en la calle ellos están tratando de influenciar al actual gobierno, lamentable el papel que está haciendo el actual gobierno de servir de vocero de todos esos poderes que se sienten amenazados.
¿Usted cree que el presidente Morales está siendo utilizado por esos poderes que se sienten amenazados?
Cien por ciento no me queda ninguna duda.
Puede leer: Ejército guatemalteco paga bono a presidente Jimmy Morales
¿Tan ingenuo lo cree?
Es que recordemos que él mismo está ahora acusado, su hermano y su hijo están enjuiciados, entonces él se siente uno más de ellos, se siente alguien perseguido por la justicia… Él no hubiera sido presidente si no es por esta ola anticorrupción que lo puso ahí y que él no haya reconocido ese hecho, pues lo pone en el mismo plano que todos los demás políticos.
¿Por qué hemos visto en Guatemala a muchos políticos juzgados, pero a pocos empresarios que se han lucrado de política?
Hay acusaciones contra muchas empresas y empresarios muy grandes del país. Pero también hay varias empresas investigadas, por ejemplo todas las que hacían contratos de carreteras con el Estado, todas están perseguidas, no hay una sola empresa que no esté siendo investigada, estamos hablando de empresas que facturaban mil millones de dólares.
La acusación contra un gerente de una de las telefónicas se diluyó en su gerente de país, que fue condenado y no pasó ni un día en prisión en un caso probado de aporte ilegal a una campaña electoral
Claro, pero en ese caso hay que ser justos en decir que este alto funcionario de esta telefónica confesó con pelos y señales todo lo que sabía.
Colaboró pues…
Colaboró y recordemos que hay una ley que premia al que colabora con la justicia y en este caso él dijo lo que sabía y se le concedió una multa en vez de la cárcel.
Además: Guatemaltecos piden la renuncia del presidente Jimmy Morales en paro nacional
Ustedes tienen preso al expresidente y a la ex vicepresidenta, el actual presidente está siendo investigado, hay juicios contra políticos de todos los tamaños ¿Qué puede aprender Nicaragua de Guatemala?
Yo creo que cada país tiene que buscar su propia fórmula. Nosotros pedimos la Cicig, nosotros la diseñamos, digo nosotros la sociedad civil la que presionó a cuatro gobiernos consecutivos para que llevara la propuesta a Naciones Unidas y que esta la apoyara, que fue otra batalla. Cada sociedad tiene que buscar su fórmula, yo creo que lamentablemente el buen ejemplo de la Cicig ahora es mala palabra porque ningún gobierno se quiere ver con una Cicig internamente, todos los presidentes van a decir, no queremos quedar presos como todos los expresidentes de Guatemala, por eso te digo que cada país tiene que ver cómo fortalecer su democracia.