Aunque ser niña en Nicaragua es algo difícil, crecer en las zonas rurales del país es peor, debido a la pobreza en los hogares, la cultura machista y la falta de protección de las instituciones del Estado, señalaron un grupo de líderes adolescentes que trabajan para visibilizar los problemas que más afectan a las niñas nicaragüenses.
Yeskania Castellón, es una adolescente de 14 años. Asegura que en Granada, su ciudad de origen, el principal problema que sienten los niños es que las escuelas quedan en zonas alejadas y algunos menores tienen que cruzar ríos para llegar al colegio. Esto implica que cuando hay lluvias, se les dificulta ir a clases.
“Hay niños que viven muy largo. Hay muchos arroyos y cuando está lloviendo estos arroyos se inundan y para llegar a casa los niños tienen que pasar el río, mojarse, muchas veces llegan enfermos a clases. De igual forma, no hay economía suficiente para que ellos se puedan movilizar en un bus que los lleve al colegio, y aunque la educación es gratis, muchas veces los padres no pueden comprarles las mochilas y por eso no van (a la escuela)”, expresó Castellón.
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Una situación similar viven los niños del departamento de Jinotega según explica, Ninoska Martínez, de 15 años, pero, en esta zona del país a la niñez también le preocupa los embarazos en adolescentes, ya que en sus comunidades se ve como algo normal que haya menores encinta. Desde el punto de vista legal estos embarazos son consecuencia de una violación.
“En mi caso es difícil porque tengo que viajar en bus a la escuela, cuando terminamos la primaria tenemos que viajar por esa razón la mayoría ya no sigue estudiando… En el bus hay violaciones a nuestros derechos, hay demasiados hombres morbosos a nuestro alrededor que tocan a las chavalas a veces y ocurren violaciones en las unidades, ese es el riesgo que nosotros corremos”, afirmó Martínez.
Ambas adolescentes participaron este miércoles en el conversatorio Qué Implica ser Niña en la Zona Rural de Nicaragua, una iniciativa de Save the Children que busca visibilizar las inquietudes que tienen los niños en todo el territorio nicaragüense. El encuentro se realizó en marco de celebración del Día Internacional de la Niña.
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Según la directora regional de Save the Children para América Latina, Victoria Ward, las niñas de Nicaragua están pidiendo desesperadamente protección ante la violencia dentro de sus comunidades, es por ello que esta organización está desarrollando una serie de programas para empoderar a las niñas, ya que estas son más vulnerables ante este flagelo.
“Si bien el país ha hecho grandes esfuerzos para llevar la educación a toda la población, hay todavía dificultades para acceder a los servicios de salud y educación, estas brechas afectan más a las niñas por su naturaleza de ser mujer, por su naturaleza de ser menores de edad”, dijo War.
En Nicaragua los programas que impulsa Save the Children están dirigidos a: educación, gobernabilidad de los derechos del niño, pobreza infantil, protección infantil, salud y nutrición.