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Cartas al Director, farsas electorales

Cartas al Director

Según las autoridades de Salud, en lo que va de año Nicaragua registró un total de 40,297 casos de conjuntivitis

Conjuntivitis y discriminación

Como buen nicaragüense soy parlanchín, bromista, perspicaz y jocoso a la vez. Suelo sonreír y verle el lado amable a las bromas pesadas de algunos incautos, pero nunca creí que “el encuentro imprevisto” de un insecto en mi ojo derecho me causaría síntomas de baja autoestima, producto de las burlas y señalamientos inquisidores que recibí de mis compañeros de trabajo y de otros sitios que visité ese día. Todos tenían una razón en común para sus burlas: la conjuntivitis.

Según las autoridades de Salud, en lo que va de año Nicaragua registró un total de 40,297 casos de conjuntivitis. En realidad los medios de comunicación han advertido las formas de evitarla o contraerla, pero hemos descuidado informar a la población a tomar medidas contra la discriminación que están sufriendo cada una de esas personas afectadas, ya sea en su hogar, colegio, universidad o centro laboral, donde a diario suelo ver gente con irritación en sus ojos y que confieso, no me causa ningún temor tenerlas cerca porque considero que esa enfermedad está en el aire que todos los días niños, adultos, altos, bajitos, feos y guapos, cristianos y agnósticos… respiramos.

En mi caso, como periodista ambiental, suelo andar en sitios recónditos del país, me rozo con toda clase de personas y ambiente. En el pacífico algo cálido, en el centro fresco y casi al norte un rico clima, en las regiones especiales es una mezcolanza, no solo de cultura, sino de personas geniales. En fin, saboreo y conozco mi país y les juro, en ningún sitio he contraído las más “terribles, horripilantes y apocalípticas” enfermedades que hemos llamado epidemias en nuestra querida Nicaragua. En mis adentros me he dicho que por ser un buen nica he creado anticuerpos potentes, gracias a los alimentos hechos a base de maíz, frutas tropicales, carne, refrescos autóctonos, comidas indeterminadas, y el buen ron. En fin, he mutado en mi piel las raíces de mi patria.

Tengo fuertes razones para creer que los burlones que discriminan a las personas con este mal tienen dos opciones: la primera es considerar que la única forma de evitar la enfermedad es yéndose del país o vivir en un búnker subterráneo o trasladarse en una especie de burbuja. La segunda es ofrecer ayuda a la persona infectada, incluso, ayudándole a volver a su hogar para que descanse y aconsejándole tomar medidas de salud. Sobre esto, los padres de familia tenemos mucha responsabilidad, puesto que es importante que trabajen para fomentar la empatía en sus hijos y familiares sobre este tema para que se evite juzgar de forma negativa y fomentar, al menos, “filtros expresivos”. Al final, señor Dios, líbrame de los burlones, no de la conjuntivitis.
David Quintana

Políticos adeptos e ineptos

Excesivos políticos, son adeptos e ineptos, les encanta abatir los derechos de sus compatriotas. Da pena cuando un pueblo permite que lo atropellen.

Son exiguos los presidentes que merecen ser elogiados sinceramente. Durante su mando en la Presidencia son devastadores de los bienes pertenecientes al Estado, del dinero que debe usarse en obras públicas, sociales, culturales, deportivas, en educación y salud, o en emergencias .

El rédito de una patria debe ser bien administrado… ¡claro que lo es!, pero en las cuentas bancarias del presidente, de su gabinete y por supuesto de los máximos representantes del poder legislativo. El salario de ellos es una rapacería al país, su presencia como diputados es superflua.

Pero hay que tener cuidado al criticar al político. Los habitantes de Cuba, Nicaragua y Venezuela han sido defraudados por hombres desalmados. A estos países los han llevado a la desgracia.

Muchos tienen que dejar su patria para no morirse de hambre junto a su familia.

Abraham Lincoln dijo: “Ningún hombre es lo bastante bueno para gobernar a otro sin su consentimiento. Donde un presidente se apodera de todos los poderes del Estado y de los diferentes medios de comunicación, agobia por montón el sentir y pensar de cada elector y se convierte en un opresor. El mayor perjudicado es el de clase baja”.

“Los diplomáticos son personas a las que no les gusta decir lo que piensan. Y a los políticos no les gusta pensar lo que dicen’’. Sin generalizar, el político aplica en exageración la hipocresía y sus seguidores son sus alumnos. El que ejerce la política se viste de apariencia y se alimenta de amistades falsas. Ellos son enemigos del verdadero intelecto que les brinda sugerencias. El tirano usa inteligencia pero en lo vano y a su favor.

Cuánta razón tenía Quevedo al decir que donde hay poca justicia es un gran peligro tener la razón.
Carlos Javier Jarquín

Chichigalpino opina sobre León

Soy chichigalpino y al visitar León recuerdo mi estancia allí durante mi infancia y juventud. Siento nostalgia del León de antes al ver al de ahora, que da la sensación de abandono como el resto de ciudades del país. La falta de estética y orden incide negativamente en la imagen como referencia turística, ya que tienta al visitante a alejarse rápidamente porque dejó de ser la otrora señorial ciudad de León Santiago de Los Caballeros, cuna de la intelectualidad y la cultura nicaragüense.

Considero que el alcalde y el Concejo Municipal deberían responder a las expectativas de sus electores y leoneses en general para resolver los principales problemas de la ciudad, para lo cual se necesita fundamentalmente voluntad política (gana de hacer las cosas) con una dosis de visión personal, prestigio de la administración pública, mucha comunicación y paciencia entre él, los concejales y resto de la administración, con su contraparte que son los usuarios involucrados, negociantes formales e informales, dueños de altoparlantes, etc., para que mediante agenda debidamente elaborada y con el apoyo de otras dependencias del Gobierno, aborden los problemas para satisfacer a la sociedad leonesa descontenta por el desorden y abandono en que se encuentra la ciudad.

Los problemas visibles que hacen de León una ciudad poco atractiva son: 1) Los triciclos transitan por toda la ciudad sin respetar el centro histórico y muchas veces son conducidos contra la vía, fomentando el desorden y el riesgo para los peatones. Se necesita un ordenamiento geográfico y capacitación sobre el conocimiento de leyes de tránsito y relaciones humanas. 2) Desorden del transporte de taxis. Debe aplicarse la ley y ordenarlos por turnos alternativos para mejorar la rentabilidad de los servicios que prestan. Paralelamente revisar eficazmente documentos de los cadetes, calidad mecánica de los vehículos y proveer capacitación en relaciones humanas para un comportamiento más cortés en el servicio prestado. 3) Resolver el problema de estacionamiento de vehículos, ordenando negocios y calles, facilitando parquímetros y aprovechar la Ley de Asociación Pública y Privada para promover y motivar la creación de áreas verticales para el estacionamiento de vehículos. 4) Regulación del tránsito por el órgano competente, apoyado por una eficiente señalización, semáforos, parquímetros, parqueos privados o público-privados. 5)

Elaborar un plan educativo integral de las áreas a resolver para atender también el problema de la basura, apoyado mediante la publicación de las ordenanzas municipales necesarias para normar, supervisar y aplicar las mismas.

Quisiera que el alcalde de León leyera mis bien intencionadas observaciones. Estoy seguro de que la comunidad leonesa en general y personas prominentes como el empresario del año, doctor Ramiro Ortiz, estarán verdaderamente orgullosos de su querido León.
Jorge Antonio Padilla Somarriba

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