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Nancy Gutiérrez Salazar (derecha) y Arlen Gutiérrez Álvarez, esposa y hermana, respectivamente de Alexander Antonio Álvarez. LA PRENSA/E. ROMERO

Hombre enviado a la cárcel por delito cometido por otra persona con el mismo nombre

Familiares de Alexander Álvarez confirman con partida de nacimiento que este solo cuenta con un apellido

Un hombre lleva un año en la cárcel de La Modelo, de Tipitapa, luego que los operadores de justicia lo enjuiciaron por poseer antecedentes penales de lesiones, pero aparentemente cometidos por un homónimo suyo.

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Nancy del Carmen Gutiérrez Salazar y Arlen Gutiérrez Álvarez, esposa y hermana, respectivamente, de Alexander Antonio Álvarez, de 28 años, denunciaron en la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), que a pesar que han recurrido a las autoridades para alegar que este es inocente, nadie les ha escuchado.

La diferencia está en el segundo apellido de la persona que fue denunciada de haber lesionada supuestamente en 2011 a Ernesto Antonio Aburto González, en el sector de Ticuantepe. El detenido no posee segundo apellido, así lo confirma la partida de nacimiento que muestran las denunciantes.

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Aburto asegura que uno de los errores en el proceso fue la forma en que la Fiscalía le planteó las preguntas, cuando a Álvarez ya lo habían llevado a juicio. Pero nunca le informaron que su agresor estaba detenido, ni lo llevaron a reconocimiento.

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Nancy Gutiérrez Salazar (derecha) y Arlen Gutiérrez Álvarez, esposa y hermana, respectivamente de Alexander Antonio Álvarez. LA PRENSA/E. ROMERO

Al salir de la primera audiencia donde determinan prisión preventiva para Álvarez, dice Aburto que este le pidió, “mirame bien”. Y es allí donde él busca enmendar el error y le dice a la fiscal que esa no es la persona que lo lesionó de una pedrada cuando conducía una mototaxi y que le ocasionó pérdidas en la vista del ojo derecho. Sin embargo, la fiscal le habría asegurado “yo ya no puedo hacer nada”. Y al final una juez falló en contra de Álvarez y le impuso una pena de seis años de cárcel.

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El caso fue llevado a revisión a la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), pero al igual que en casación eso llevará mínimo unos dos años, dice Pablo Cuevas, asesor legal de la CPDH. “En este tipo de casos solo falta una comprobación, que la Policía vaya al domicilio de la persona indiciada y se hagan algunas entrevistas y se actúe de manera objetiva”, indicó Cuevas.

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