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Tarjetas de crédito

El aguinaldo: cómo no desperdiciarlo

Si bien usar el aguinaldo para pagar las deudas que tengamos es una buena opción, no será efectiva si una vez saldadas esas cuentas, no modificamos los hábitos de consumo

Llegó noviembre, mes en el que el comercio inicia su mejor momento del año, debido a la inyección de dinero en la economía nacional producto del aguinaldo –que para 2016 se estimó en unos 350 millones de dólares, cifra que podría superarse este año–.

¿Y por qué creen ustedes que es la época dorada del año para las tiendas? Porque generalmente utilizamos esta “abundancia” de dinero en consumo hedónico, es decir, el que nos proporciona placer. El problema es que en ese frenesí consumista se nos diluyen nuestras metas y planes de corto, mediano y largo plazo, los que pudieran ser abonados con este ingreso extra llamado “decimotercer mes” o aguinaldo.

Recientemente hice un sondeo rápido en mi cuenta de Twitter para conocer en qué están destinando su aguinaldo mis lectores en esa red social. Con más de 500 votos, estos fueron los resultados:

La mayoría lo usará para pago de deudas, y aunque en segundo lugar puntea la opción “Ahorrar”, por poco le alcanza la opción de los gastos relacionados con la temporada navideña. ¿Qué nos indican estos datos? Primero, que la mayor parte de los que votaron se gastaron el aguinaldo antes de recibirlo, y como esta no es la primera vez que hago sondeos de este tipo, puedo asegurar que en general en Nicaragua el aguinaldo se va en pago de deudas contraídas a lo largo del año, con la esperanza de ser pagadas con ese ingreso extra.

Esto es reflejo de una costumbre arraigada en el país: tendemos a gastarnos las cosas antes de tenerla, y, en consecuencia, luego no podemos usar ese dinero para otros proyectos.

Si bien usar el aguinaldo para pagar las deudas que tengamos es una buena opción, no será efectiva si una vez saldadas esas cuentas, no modificamos los hábitos de consumo que nos llevaron a comprometer de antemano ese dinero.

Por tanto, si tu opción para ese salario adicional que te pagarán pronto es honrar deudas, planificá de manera que salgás del círculo vicioso de gastar sin medida para pagar con el aguinaldo, que una vez sin deudas se convierte en un nuevo motivo para gastar sin medida nuevamente. Si no rompés ese círculo, año con año desperdiciarás tu aguinaldo.

Y, hablando de desperdiciar el aguinaldo, estas son tres formas efectivas de echarlo a perder (que no te pase):

– No planificar antes de gastar. Esto aplica a cualquier época del año: si no planificás en qué usarás el dinero antes de empezarlo a gastar, nunca harás nada productivo –y duradero– con él.

La planificación debe responder a una estrategia inteligente: ¿lo usarás para pagar deudas? (si es así, cuáles, cuánto y cómo eso impactará en tus finanzas), ¿lo usarás para invertir? (en qué, cuánto y qué beneficios obtendrás), ¿lo vas a ahorrar? (para qué, cuánto). Planificá antes de distribuirlo.

-Gastarlo todo. Gastar es lo más fácil del mundo; cuando tenemos dinero en la billetera todo se nos antoja y repentinamente tenemos un golpe de buena memoria que nos hace recordar todas las cosas que “necesitamos”, que “debemos” cambiar o sustituir, o lo que necesitan y quieren las personas que queremos (nos convertimos en Santa Claus o el Niño Dios, el que te guste más). Al margen de si hay tantas necesidades o no, gastar todo tu aguinaldo no es una buena decisión. Es el mejor momento para poner la semilla de tu fondo para emergencias (si no lo tenés aún).

-Tener el complejo del “fin del mundo”. Entre noviembre y diciembre, cuando tenemos más dinero en nuestras manos, pareciera que nos quema tener esos billetes cerca y sentimos la necesidad de deshacernos de él, sin importar cómo o en qué, con un afán de que con el año se acabe también el dinero, sin pensar en que el 1 de enero igual habrá cuentas que pagar y muchos gastos por hacer frente. El mundo no termina en diciembre, por tanto debemos quitarnos ese complejo y pensar mejor.

Y si querés conocer buenos usos que podés darle a tu aguinaldo para que te ayude a lograr tu bienestar económico, te invito a que me acompañés a la charla gratuita que realizaré el próximo 8 de noviembre sobre este tema. Aquí podés hallar el formulario de inscripción  para garantizar tu cupo. Te espero.

(*) Educadora financiera y autora del portal de finanzas personales Dele Peso a sus Pesos.
consultas@delepesoasuspesos.com

Economía Dele peso a sus pesos archivo

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