Felipe Pérez Reymundo, líder comunitario de Santa Clara, en el territorio indígena de Wangki Twi Tasba Raya, Waspam, se sumó al listado de indígenas asesinados en territorios miskitos.
El hecho fue denunciado a Cejudhcan por líderes comunitarios, confirmó a través de un escrito la directora del Centro por la Justicia y Derechos Humanos de la Costa Atlántica de Nicaragua (Cejudhcan), Juana Bilvano Webster, quien refirió que el pasado 29 de noviembre, la víctima regresaba de su parcela junto a su hermano cuando en el sitio llamado Sukuas Tingni, fueron atacados con armas de guerra por colonos.
El hermano de la víctima logró escapar tomando otra dirección hasta llegar a la comunidad de Santa Clara donde pidió auxilio para ir en busca de su hermano.
Fue hasta el jueves 30 de noviembre que los líderes comunitarios localizaron el cuerpo del fallecido.
En septiembre pasado la presidenta de Cejudhcan, Lottie Cunningham, señaló que la impunidad en la que quedan los crímenes de indígenas en el Caribe Norte, es una de las causas que provocan que persista la violencia en esos territorios.
“Las autoridades tradicionales de la comunidad de Santa Clara, solicitan a las autoridades de la Policía y el Ejército de Nicaragua investigar los hechos, sancionar al autor material, y que no quede impune como pasaron con los crímenes de líderes indígenas, heridos y violaciones sexuales, que nunca fueron esclarecidos”, dice Cejudhcan.
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Como consecuencia de estos hechos en las comunidades indígenas de Waspam, a la fecha muchos comunitarios están desplazados en otras comunidades, señala Cejudhcan que reitera la demanda de la población indígena afectada por la violencia a causa de la invasión de colonos por lo cual “exigen al Estado de Nicaragua el cumplimiento de las medidas cautelares otorgadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y medida provisional de la Corte IDH a favor de las 12 comunidades indígenas del municipio de Waspam que sufre el ataque de los colonos terceros”.
La comunidad de Santa Clara fue una de la primeras cuatro comunidades a las que la CIDH otorgó medidas cautelares las otras tres fueron La Esperanza, Wisconsin y Francia Sirpi, del territorio indigena Wangki Twi Tasba Raya, donde habitan unas 1,500 personas.