Para nadie es un secreto que el atletismo nicaragüense es del tamaño de un bonsái, sin embargo durante los últimos dos años se ha trabajado para brindar una actuación decorosa en casa. La expectativa de la federación es ambiciosa: tres oros, seis platas y 11 bronces, un total de 20 medallas. Hace cuatro años en San José solamente pudo levantar el oro de Dalila Rugama, una plata de Erick Rodríguez y cuatro bronces. Colocando las medallas a un lado, el principal reto debe ser quebrar nuestras propias marcas que hasta el momento 16 de ellas poseen más de 20 años de existencia.