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Rodney Theophile hizo su debut con los Nacionales de Washington. LA PRENSA/ARCHIVO

Rodney Theophile, el nuevo jugador de los Nacionales que quiere ser Max Scherzer

El 16 de septiembre de 2016 fue el día en que cambió todo para Rodney Theophile Cuthbert. El mundo se partió en dos para el muchacho que acaba de firmar con los Nacionales de Washington por 20,000 dólares.

El 16 de septiembre de 2016 fue el día en que cambió todo para Rodney Theophile Cuthbert. El mundo se partió en dos para el muchacho que acaba de firmar con los Nacionales de Washington por 20,000 dólares. Mientras tomaba un avión con rumbo a República Dominicana, su papá (Rodney Theophile) fallecía de un ataque al corazón. El hombre fuerte y alegre partía a los 39 años de vida sin tiempo para despedirse. Su mamá (Janina Cuthbert), separada del papá del joven lanzador, no sabía cómo decírselo. “No quería que se enterara por las redes sociales” y por eso lo llamó hasta Dominicana con la noticia que apagó por seis meses la ilusión del joven costeño.

“Costó recuperarlo. Perdió peso, velocidad y mentalmente no estaba bien”, dijo un miembro de la Academia MVP Rivera. Su mamá le decía: “Usted tiene que recordar a su papá en los mejores momentos, no muerto. Él quiere verte en Grandes Ligas”. Y así fue como las cicatrices fueron sanando con el tiempo y el esfuerzo de cambiar el futuro económico de su familia. “Me sentí muy mal, pero sé que mi papá quiere que no baje la cabeza y que mire siempre hacia adelante”, señala aún con nostalgia Rodney, primo de Cheslor Cuthbert, según indica Janina Cuthbert.

Theophile, ahora con 18 años, recuerda que a los 12 fue cuando por primera vez decidió introducirse al beisbol. Inició en su natal Laguna de Perlas. Era primera base y su primer entrenador fue Dennis Martínez. Luego Alex Mongrío, ahora scout de los Bravos de Atlanta, lo captó y lo trajo a Managua, donde al ver su estatura de 6’5 y su gran potencial lo convirtió en lanzador, y posteriormente, zarpar a desarrollarse a República Dominicana.

Tres años Theophile pasó en el país caribeño puliendo su escopeta. Actualmente su bola rápida ronda las 94 millas y se mantiene en 92 de forma sostenida, según el mismo pelotero explica. “Soy un lanzador valiente, mis pitcheos favoritos son la curva y recta, uso mucho la parte de afuera del cajón de los bateadores. Cuando llegué a Dominicana mis entrenadores trabajaron mucho mi velocidad”, afirmó Rodney.

“LANZARÁ 97 MILLAS”

El scout de los Nacionales de Washington, Miguel Ruiz, cree que el nicaragüense podría llegar a lanzar 97 millas por hora: “Como toda organización el objetivo es que llegue a las Grandes Ligas, pasará de las 95 a 97 millas por hora. Me gusta su forma de ser, es un tipo callado con buena disciplina e inteligente y capta todo, cuando se hizo la prueba para verlo lanzar, se le indicaron algunas cosas y las captó y ejecutó rápidamente”.

El ahora jugador de los Nacionales quiere llegar a ser como el lanzador estelar Max Scherzer. “Me gusta su forma de lanzar”, dice el joven costeño, quien es producto de su madre, no obstante, hasta hace algunos años Theophile quería ser agrónomo y le gustaba leer mucho, afirma su mamá, pero cuando le entró la fiebre del beisbol se convirtió en él algo crónico. Dejó la secundaria en cuarto año y las esperanzas de Janine porque su hijo jugara baloncesto, sin embargo, todo están conscientes de que es ahora que empieza el juego.

Deportes Rodney Theophile archivo

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