Luego del ataque armado a un activista del partido Ciudadanos por la Libertad (CxL) y a un trabajador de la opositora Alcaldía de San José de Bocay, la indignación y el terror se ha apoderado de los jóvenes de la zona y varios de ellos están considerando irse del país, afirmó Violeta Granera, coordinadora del Frente Amplio por la Democracia (FAD).
A pesar de que el gobierno del designado presidente Daniel Ortega califica a Nicaragua como el país más seguro de Centroamérica y expresa constantes discursos de amor y paz, los ataques a opositores y campesinos han incrementado significativamente, analiza Granera.
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Los heridos son Nixan Zambrano (de CxL) y Carlos Fernando Hernández, trabajador de la comuna.
Asimismo, “los jóvenes quieren irse no solo por razones económicas, sino por un sentimiento de vulnerabilidad ante hechos tan espeluznantes como el atentado”, advirtió Granera, quien mantiene comunicación con diversos sectores de la juventud en esa zona del país.
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Granera indicó que el Gobierno debería hacer una investigación exhaustiva sobre el ataque, con la participación de organismos de derechos humanos para tener mayor credibilidad. Además de dar a conocer los resultados de la misma en el menor tiempo posible y, sobre todo, castigar a los hechores.
“Si el Gobierno no tiene nada que ver, es muy fácil que detengan a los que cometieron ese atentado porque es un pueblo pequeño (San José de Bocay) y todo mundo se conoce”, destacó Granera.
Gobierno incoherente
Para el jurista Gabriel Álvarez, el discurso de amor, paz y reconciliación que la pareja Ortega-Murillo predica “es una falacia”.
En palabras se muestra como defensor de las causas sociales, pero hace todo lo contrario, expresó Álvarez.
Indicó que la familia gobernante “ha construido un modelo funesto sobre algunos pilares como su alianza con una pequeña parte de los empresarios, la represión física, el asesinato, la utilización de los jueces y el Ministerio Público; el cinismo y la mentira”.
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“No hay un solo campo de la vida nacional en la que tenga que ver el Gobierno, en la que se pueda notar una conducta ética, coherente y sistemática”, dijo el experto.
Pueblo indefenso
Roberto Cajina, experto en Seguridad y Defensa, cuestionó el quehacer de las autoridades competentes para proteger a los jóvenes y a la ciudadanía en general.
Cajina indicó que “la Ley de la Policía Nacional dice que es responsabilidad de esta institución proteger la vida, integridad y seguridad de los habitantes”.
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Lamentó que en Nicaragua la mayor parte de los ciudadanos estén en una situación de indefensión, pues no hay entidades a donde recurrir.
“Se recurre a la Policía y a la Fiscalía, y estas no actúa porque hay una disposición desde el Ejecutivo de no proteger a la ciudadanos”, confió el experto.
¿Qué hacer?
A criterio de Cajina, a la población solo le queda la “denuncia ante los medios de comunicación independientes y ante los organismos de derechos humanos, pues las instituciones del Estado no actúan de ninguna manera”.
El experto recalcó que en Nicaragua “hay amor y paz a garrotazos y con amenazas”, cuando debería existir un clima de seguridad y respeto.