Los casos por delitos de violencia contra la mujer, niños y adolescentes que ingresaron en el 2017 a los juzgados especializados en violencia de Managua aumentaron levemente respecto al 2016, ya que pasaron de 2,583 a 2,702, según datos del Complejo Judicial y la Memoria 2016 del poder judicial de Nicaragua.
En los juzgados especializados en violencia se ventilan todos los delitos contenidos en la Ley 779 o Ley Integral Contra la Violencia hacia la Mujer.
Entre estos, el delito con mayor frecuencia es el incumplimiento de la pensión de alimentos, que presenta un incremento de 26 por ciento, pues pasó de 1,542 en el 2016 a 1,952 expedientes en el 2017.
Estas causas generalmente terminan en mediación, según explicaron jueces especializados, porque la idea es recuperar dinero a favor de los niños, niñas y adolescentes, para solventar gastos de alimento, entrada a clase y demás necesidades.
Seguido al incumplimiento de alimentos está la violencia psicológica con 466 casos; el abuso sexual, donde la mayoría de las víctimas son niñas, niños y adolescentes con 219 procesos.
Lea además: Delito de abuso sexual es un problema real en Nicaragua
Otros delitos recurrentes son la violación agravada con 95 casos, la violencia doméstica con 92 expedientes, las lesiones psicológicas con 66 casos, violación 45, violación a menores de 14 años reporta 44 casos, violencia patrimonial con 33 casos ingresados.
Según las audiencias celebradas, las víctimas de los abusos y violaciones son niñas, niños y adolescentes. Los agresores son familiares, amigos, profesores y vecinos, es decir personas que forman parte del círculo del menor. Además, las audiencias y juicios se hacen a puertas cerradas a petición de alguna de las partes o bien de oficio por el judicial.
Mismos obstáculos
Elia Palacios, de la Red de Mujeres Contra la Violencia, señala que el tratamiento procesal de estos casos en los juzgados varía según el departamento y la preparación sobre género y violencia del juez.
Entre los obstáculos en la aplicación de justicia está la reprogramación de las audiencias, porque la víctima se cansa o se queda sin testigos, la falta de aplicación de prisión preventiva en casos que lo ameritan, por ejemplo, donde estuvo en peligro la vida de la mujer, la mediación, la mala tipificación del delito de parte de la Fiscalía o la Policía.
Puede leer: Desconfianza en Policía evita más denuncias, según expertos en seguridad
“Muchas veces, la agresión contra las mujeres de parte de sus maridos, la Policía las pasa como falta, entre estas el asedio (3,806 casos en el 2017 en Managua) o como agresión contra las personas. Esto lo que hace es ocultar la violencia contra la mujer, pero no la disminuye en la realidad”, dijo Palacios.
Otras veces, agregó Palacios, el Ministerio Público califica el homicidio frustrado como intimidación o amenazas contra la mujer, bajo esta tipificación ingresaron 179 casos en el 2017 en los juzgados de violencia de Managua.
18,786 denuncias por violación se presentaron entre el 2010 y el 2017 en la Policía, de estas fueron resueltos 15,323 casos, según el Libro Blanco sobre incidencia delictiva en el país, que esta semana publicó el gobierno.