La directora del Instituto de Liderazgo de Las Segovias y miembro de Panorama Electoral, Haydée Castillo, consideró que la “renuncia” del alcalde sandinista de Muy Muy (Matagalpa), Orlando Antonio Blandón Peralta, a menos de un mes de haber iniciado su gestión, es un indicador de que el gobierno de Daniel Ortega no va a cambiar el “control absoluto” sobre la municipalidad, pese a las presiones estadounidenses y al diálogo con la Organización de Estados Americanos (OEA).
Los acuerdos entre el gobierno de Daniel Ortega y la OEA eran para “fortalecer la democracia”, pero con esto “queda claro que desapareció totalmente la democracia en el país”, dijo Castillo.
Nueve concejales sandinistas tomaron la decisión de “aceptar la renuncia” de Blandón supuestamente por motivos de salud, en una sesión convocada el lunes, en la que no estuvo presente el ahora exalcalde.
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Desde 2008 hasta 2016, bajo el mandato de Daniel Ortega, 33 alcaldes fueron separados de sus cargos y en los casos que se dio una explicación, se dijo que fue por motivos de salud, pero extraoficialmente se ha conocido que es por diferencias con las orientaciones del Gobierno central, dirigido desde 2007 por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN).
Los simpatizantes del FSLN protestaron el lunes frente a la Alcaldía de Muy Muy y la casa municipal del partido, exigiendo que Blandón Peralta quedara en el cargo.
“Este es un gobierno popular que no respeta el voto ni de su propia militancia”, dijo Castillo.
“Murillo, alcaldesa”
El sociólogo Cirilo Otero manifestó que la defenestración de alcaldes es una práctica común del régimen orteguista, debido a su naturaleza de control absoluto, que deja sin efecto la Ley de Autonomía Municipal (Ley 40) que debería de regir en cada municipio.
Según Otero, en el sistema de concentración de poder del régimen orteguista, la primera dama y vicepresidenta designada, Rosario Murillo, actúa como la “alcaldesa nacional”, porque “ella dirige las acciones de cada una de las alcaldías”, mientras que las comunas pasan a ser “simplemente oficinas o delegaciones partidarias”.
Otero dijo que esta práctica es violatoria a la Ley 40; sin embargo, considera que “el poder absoluto ha hecho que el gobierno de Ortega deje de guardar las apariencias de que cumple con la Ley”.
Alcaldesa sin aparecer
La alcaldesa sandinista de San Juan de Oriente, en Masaya, Brenda Jiménez, sigue sin aparecer.
Extraoficialmente se conoció que funcionarios del Instituto de Fomento Municipal (Inifom), de Managua y Granada, están realizando una auditoría en esta municipalidad y que Jiménez se encuentra suspendida de sus funciones, por lo que en los próximos días estarían dando los resultados. El exdiputado Agustín Jarquín Anaya explicó que “en el caso de la alcaldesa de San Juan de Oriente no puede ser suspendida, porque los partidos no tienen ninguna incidencia de Ley y es violatorio”.
Renuncia escrita y pública
El exdiputado y expresidente de la Comisión de Asuntos Municipales, Agustín Jarquín Anaya, explicó que el alcalde sandinista de Muy Muy, Orlando Blandón, debió presentar una renuncia escrita pública, la cual debió publicitar el Concejo Municipal y el Consejo Electoral en aras de la transparencia, porque es una obligación que está establecido en la misma Ley 40.