El canciller de Costa Rica, Manuel González, confía en que el fin de los litigios fronterizos que durante años su país ha mantenido con Nicaragua, por las delimitaciones marítimas, permita generar “los espacios de confianza necesarios para desarrollar una mejor relación” a partir de ahora.
Así lo manifestó González en una entrevista en Madrid, donde este viernes se reunió con su homólogo español, Alfonso Dastis, con el que trató, entre otros asuntos, los recientes fallos de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) con los que quedó zanjado el “histórico conflicto” entre ambos países.
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El pasado 2 de febrero, la corte de La Haya dio a conocer el fallo por el que quedó delimitada la frontera marítima entre esos dos países centroamericanos, poniendo fin a una disputa que había dañado durante años la relación bilateral.
“Las relaciones con Nicaragua hasta el momento han estado distantes, en algunos momentos tensas”, señaló el canciller, para quien, a pesar de ser vecinos y compartir una agenda binacional muy amplia, “las circunstancias nunca permitieron que la relación evolucionara hacia la dirección correcta”.
Fallos de la CIJ
Entre los fallos emitidos, la CIJ decidió de forma unánime que el norte de la conocida como Isla Portillos es de soberanía costarricense y, ordenó a Nicaragua, desmantelar un pequeño campamento militar que mantiene en un banco de arena de esa zona fronteriza.
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Los jueces también establecieron los límites marítimos en el Caribe y el Pacífico.
González aseguró que Costa Rica “se siente satisfecha” con lo que resolvió la Corte en materia de límites, una decisión “que es muy similar a lo que propusimos en nuestra demanda, tiene muy pocas variaciones”, dijo.
Sin embargo, el canciller reconoció que fue “una sorpresa” el monto económico con el que la Corte decidió penalizar a Nicaragua por los daños medioambientales ocasionados en Isla Portillos durante el tiempo que estuvo instalado el campamento militar.
Por esos daños Costa Rica había reclamado 6.7 millones de dólares, de los que su vecino sólo tendrá que pagar 378,890 dolares.
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“Nos pareció un monto muy bajo, aunque tampoco es que estuviéramos solicitando mucho, pero creemos que la Corte fue muy conservadora a la hora de estimar el daño ecológico”, precisó.
Temas en común
En todo caso, González hizo hincapié en los “numerosos” temas que unen a ambos países, como los asuntos migratorios, de comercio, salud, educación, y de seguridad, “porque todos estamos afectados por el crimen organizado transnacional, concretamente en lo que respecta al trasiego de drogas”.
“Deberíamos caminar en la misma dirección y tener una mejor relación a partir de ahora”, remarcó.
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En su encuentro con Dastis, el canciller repasó también los resultados de las elecciones presidenciales celebradas en su país el pasado domingo, cuyo resultado final se dirimirá en una segunda vuelta el 1 de abril.
Elecciones ticas
Ese día se enfrentarán Carlos Alvarado, del gobernante Partido Acción Ciudadana, que obtuvo el 21.74 por ciento de los votos, y, contra todo pronóstico, Fabricio Alvarado, un periodista y predicador evangélico del Partido Restauración Nacional, que consiguió un 24.78 por ciento.
“El día antes de las elecciones no se sabía realmente quienes iban a pasar a la segunda ronda, ya solo por eso fue un proceso electoral distinto a los demás. Pero evidentemente, la decisión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre el matrimonio gay radicalizó las posiciones”, señaló González.
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Ese asunto “se convirtió en uno de los temas, si no en el tema más importante de la campaña, cuando hay otros que afectan mucho más profunda a la sociedad costarricense, como el déficit fiscal, el índice de pobreza o el desempleo, y uno de los candidatos logró ponerlo como tema de discusión electoral”.
“Y no es que sea un tema de poca monta -remarcó el canciller- pero hay muchos otros temas muy profundos en el país que como ciudadano aspiraría a que se discutan de aquí a la segunda vuelta”.