Los mánagers varían en cuanto a calidad, perspicacia y habilidad para conducir el picheo. Hay muchos de carácter explosivo, otros que logran controlarse y también los hay pasivos. Hay quienes dominan el juego y quienes basan su éxito en su capacidad para motivar.
Heberto Portobanco era muy astuto. Oscar Larios tenía temperamento de cocodrilo, Argelio Córdova recurría a su picardía y Noel Areas se apoyaba en su trato al equipo. Lo que todos tenían en común, es que eran ganadores y eso, además de estabilidad, les dio reputación.
También: ¡Precios accesibles! Los boletos de la serie de la Selección de Beisbol ante Cuba
Y entre los timoneles de los últimos tiempos, Omar Cisneros ha sido el de mejor manejo de la palabra. Davis Hodgson el más metódico en su estudio del juego, Ramiro Toruño el más constante y Julio Sánchez el de mayor vigencia, tanto así que aún dirige la Selección.
“Contentos con su desempeño”
¿Qué tan bueno es Sánchez? “Lo suficiente como para confiarle la Selección Nacional”, afirma Nemesio Porras, presidente de la Federación Nicaragüense de Beisbol Asociada (Feniba). “Y al menos hasta hoy, estamos muy contentos con su desempeño”, agrega el dirigente.
Sánchez ha sido exitoso. Dirigió por primera vez en 1995 y ese año condujo a la selección al rendimiento más consistente de todos los tiempos. Ganó medalla en todos los torneos en que participó: Panamericanos, Juegos del Pacífico, Preolímpico y Copa Intercontinental.
En su más reciente salida ganó el oro en los Juegos Centroamericanos realizados aquí y se alista para conducir al equipo en los Juegos Centroamericanos y del Caribe en Barranquilla, Colombia, donde Nicaragua aspira a una octava medalla en el torneo de beisbol.
No se inmuta
Pero Sánchez de 62 años, a menudo es criticado por continuar en el equipo, por no renovar el plantel y por fanatizarse con un determinado grupo de peloteros. El también comisionado mayor de la Policía Nacional no parece inmutarse y se mantiene concentrado.
“Nadie logra caerle bien a todo el mundo. Yo me remito a mi trabajo, a los logros que como equipo hemos alcanzado y ya. Ahora tenemos el reto de los Juegos en Barranquilla y vamos a trabajar para alcanzar el mejor desempeño posible”, señala el timonel nacional.
En su etapa inicial como mánager, Sánchez se caracterizó por ser riguroso en la imposición de la disciplina, pero luego aflojó y optó por ser entrenador en lugar de timonel. Sus críticos indicaban que tomaba esa decisión para no comprometerse y viajar con el equipo.
El indicado
“Cada quien tiene su criterio, pero si Julio no deseaba ser mánager, había que respetar esa decisión. Sin embargo, tras la muerte de Noel Areas, en la Feniba nos decidimos por Julio porque nos parece el más apropiado para dirigir en este momento”, agrega Porras.
Además de expresarse bien, motivar al colectivo y ser abierto con el periodismo, Sánchez es de los timoneles más actualizados del país. Aparte de sus frecuentes viajes a República Dominicana, también hizo un diplomado en beisbol en México y ha publicado libros.
“Una de las críticas que se le hace a Sánchez, tiene que ver con los peloteros que se llaman a la Selección. Pero esa no es una decisión solo de Julio. Ahí va Feniba y los coaches que lo acompañan. De modo que hay una responsabilidad compartida”, indicó Porras.
Algunos detalles
Julio Sánchez nació el 28 de septiembre de 1955 en Managua. Acumuló .269 de promedio en su carrera de 19 temporadas en Primera División. Bateó 1,032 hits.
Su jonrón ante República Dominicana en los Juegos Panamericanos de Caracas, Venezuela, en 1983, es el más famoso y útil disparado por un artillero pinolero.
Ha sido campeón nacional en cuatro ocasiones con los Indios del Bóer en los “Pomares” como mánager y otras tres más como entrenador general de la tribu.