La coautora del proyecto de ley Nicaraguan Investment Conditionality Act (Nica Act), Ileana Ros-Lehtinen, hizo fuertes críticas a través de las redes sociales al congresista Francis Rooney, que de ser uno de los 25 principales patrocinadores de ese proyecto, pasó a ser un cabildero en contra de la Nica Act en el Senado.
El empresario Roberto Argüello, que cabildea en Estados Unidos para modificar el Nica Act y que no se apliquen las sanciones económicas, dijo este jueves a LA PRENSA que es muy amigo de Rooney y que habló con él la primera vez en mayo de 2017 para concienciarlo sobre la iniciativa.
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Sin embargo, negó que el congresista sea un cabildeador más contra la Nica Act.
“Mientras que al pueblo de Nicaragua le niegan reformas democráticas el representante (Francis) Rooney pasa de patrocinar mi Nica Act, a ayudar a Ortega y sus compinches a abusar de los derechos humanos, cometer actos de corrupción y violar el estado de derecho. Qué lástima que el dinero es más importante”, tuiteó la legisladora en su cuenta.
El diario Miami Herald publicó que Rooney, a quien define como un novato legislador republicano por el Distrito 19 del estado de la Florida, cambió de opinión luego que el proyecto de ley fue aprobado por el Congreso de Estados Unidos, el 3 de octubre del 2017.
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Rooney fue uno de los 25 legisladores firmantes del proyecto.
Ahora Rooney supuestamente se ha tomado la tarea de llevar a representantes nicaragüenses ante senadores para abogar contra la Nica Act.
Vínculos comerciales
La publicación revela que el “cambio de opinión” estaría influenciado por razones económicas debido a que Rooney tiene vínculos comerciales con Nicaragua.
El Miami Herald también precisa que el empresario Carlos Pellas, al que describe como el primer multimillonario nicaragüense y uno de los hombres más ricos de Centroamérica, ha estado viajando a Washington, al Senado, desde agosto de 2017 para hacer presión sobre el tema de la Nica Act y evitar su aprobación.
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La Nica Act persigue evitar que Estados Unidos vote a favor de préstamos que realice el gobierno de Ortega ante los organismos financieros internacionales, hasta que ese régimen realice elecciones libres, justas y transparentes, retome el proceso democrático, combata la corrupción y respete los derechos humanos de los nicaragüenses.
“Pellas y Ortega establecieron una buena relación cuando el presidente de izquierda decidió respetar la propiedad privada después de asumir la presidencia en 2007”, describe el Miami Herald, al referirse a la relación entre el mandatario y el empresario.
Ros-Lehtinen confía que nada detendrá Nica Act
Ros-Lehtinen dijo al medio estadounidense que la única razón por la cual su proyecto de ley aún no ha sido aprobado, es por asuntos de agenda y tiempo.
El diario asegura que una gran cantidad de senadores de ambos partidos, incluyendo influyentes como el republicano de Florida, Marco Rubio; el republicano de Texas, Ted Cruz; el demócrata de Nueva Jersey, Bob Menéndez; y el demócrata de Vermont, Patrick Leahy, han patrocinado una nueva versión en el Senado del proyecto de ley.
“Si permitimos que la élite gobernante de Nicaragua explote los préstamos internacionales para incorporar aún más (dinero) a empresas corruptas de regímenes antiamericanos, nos estaremos haciendo de la vista gorda”, dijo Cruz en un comunicado, que cita el Miami Herald.
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“El esquema de petrodólares de Venezuela, las operaciones de inteligencia, y ventas de armas de Rusia, es influencia externa que comprometería el futuro del pueblo de Nicaragua y plantea implicaciones de seguridad nacional no solo para los Estados Unidos, sino también para todos nuestros aliados en el hemisferio occidental”, cita el diario a Cruz.
Ros-Lehtinen dijo que habló con Rooney después de que descubrió que él a sus espaldas cabildea en contra de la ley que patrocinó, pero que la conversación no fue larga.
“(Le) dije que esa no es una buena manera de construir relaciones. Le di el beneficio de la duda porque quizás no sabe que no es buena forma ir en contra de un colega republicano, floridano, cuyo proyecto de ley patrocinó y luego se dio la vuelta porque algún cabildero lo contactó y cambió de opinión. Esperemos que sea un error de novato”, dijo la legisladora.