Aunque en la temporada lluviosa del año pasado el territorio nacional no fue azotado por ningún huracán, al menos unas cincuenta personas perdieron la vida; 38 por sumersión y el resto por impacto de rayos o afectaciones colaterales, según el último boletín climático de Centro Humboldt.
El documento, a través del que la organización ambiental hace un análisis sobre el comportamiento climático del segundo período lluvioso del 2017 y el impacto que tuvo en el país, también expone que durante todo el 2017 hubo 294 hechos noticiosos relacionados con eventos naturales, de estos, el 17 por ciento correspondió a actividades antrópicas (provocadas por el hombre), 23 por ciento de origen geológico y el 60 por ciento, la mayoría, relacionado a clima, detalla el documento.
En el último informe emitido por parte del Gobierno refiere que solo en el mes de octubre de 2017, hubo 26 muertos relacionados a eventos meteorológicos; entre estos, bajas presiones, tormenta Nate y frente frío que afectaron el país provocando inundaciones. En ese período, las autoridades decretaron alerta amarilla y posterior, alerta roja para algunas zonas del país.
Lea también: ¿Qué son las alertas verde, roja y amarilla?
Abdel García, oficial de cambio climático del Centro Humboldt, explicó que se monitorearon 15 medios de comunicación, entre radio, prensa escrita y televisión.
García explicó que “no se necesitan huracanes, grandes fenómenos naturales para que hayan muertos”, sostuvo.
Para García dos factores son claves en el país: vulnerabilidad en los territorios y cantidad de población. Sin embargo, aclaró que los efectos dependerán del tipo de fenómeno, ya que no todos los lugares son impactados de la misma manera.
El agrometeorólogo Agustín Moreira explicó que persiste una alta vulnerabilidad y falta de educación ante situaciones climáticas extremas, ya que muchas de las muertes se debieron a imprudencias.
Lea además: La tormenta Nate y bajas presiones son los desastres que marcaron el 2017
Lluvias más fuertes
Las lluvias de 2017 superaron, en la mayoría de los territorios, las normas históricas. Se produjeron más frecuentemente precipitaciones de tres dígitos, es decir, que en un corto período de tiempo llovió de 100 a 250 milímetros. No obstante, el acumulado de 250 milímetros de agua es lo que debería de caer durante un mes. Un ejemplo de este comportamiento ocurrió en Somotillo: el 5 de mayo se registraron 261 milímetros de lluvia.
Lea además: Tres fenómenos castigan a Nicaragua
21
tormentas tropicales se esperaban para la temporada de huracanes 2017, pero se nombraron diecisiete. La tormenta Nate impactó el Caribe del país y fue la más mediática en la región Centroamericana.