El ahogamiento es un forma de morir que puede evitarse. No obstante, constituyen la tercera causa de muerte por traumatismo no intencional en el mundo según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es por tal motivo que un grupo de médicos nicaragüenses iniciaron una campaña nacional para concienciar a la sociedad sobre la prevención de la muerte por sumersión.
Esta iniciativa privada reveló que los principales factores de riesgo de ahogamiento son: prácticas arriesgadas en el agua, vivir cerca de cuerpos de agua, viajes acuáticos, inundaciones, descuido en la atención a los niños, consumo de alcohol, epilepsias y entrar en balnearios desconocidos.
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El director del Centro de Investigaciones y Estudios de la Salud (CIES), Miguel Orozco, explicó que el ahogamiento puede considerarse un problema de Salud Pública, ya que a nivel mundial se calcula que cada año mueren 360,000 personas por esta causa.
El riesgo de ahogamiento es mayor en niños, varones y personas con fácil acceso al agua.
“Las muertes por sumersión es una características de un evento que debiera ser solamente para diversión… es un momento de ir a la playa, pero esto se convierte en un problema de Salud Pública al originar tantos fallecimientos, al originar tanto dolor, al originar muertes que no deberían ocurrir”, expresó Orozco.
Por su parte, especialista en Medicina Interna, Vicente Maltez, enfatizó que en Nicaragua las muertes por sumersión se producen porque buena parte de la población mantiene una actitud temeraria cuando están en la playa, además hay un consumo irresponsable de alcohol, por lo que enfatizó la necesidad de educar a la ciudadanía sobre este tema.
“En Nicaragua más de tres millones de veraneantes acudirán (durante la Semana Mayor) a más de 138 balnearios… Las playas del pacífico nicaragüense tienen pendientes muy pronunciadas, oleaje fuerte, remolinos y turbulencias. Entre las de mayor peligro se encuentran el Triángulo de Pochomil, El Tránsito, El Velero, Casares, La Boquita, San Diego, Paso Caballos y Las Peñitas”, dijo el galeno.
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De igual forma, la psicóloga Amanda Maltez, precisó que el ahogamiento es una muerte muy dolorosa ya que la persona pasa varios minutos en agonía. Además, genera un estrés postraumático en toda la familia de la persona fallecida.
“Esto es un problema de Salud Pública y es algo de lo que tenemos que hablar y concienciar a los tutores, a las familias y las personas que hacen excursiones, son de dos a diez minutos de agonía, de asfixia, de angustia, de miedo, pasa la vida en un segundo… y es algo que podemos prevenir”, dijo la psicóloga.
Cómo se puede prevenir
Entre las recomendaciones que realizaron los médicos para prevenir las muertes por sumersión se destacan: cuidar a los niños, respetar los límites de playa, consumo responsable de alcohol y acostumbrar el cuerpo al cambio de temperatura.
“Quienes se introducen bruscamente al agua, en especial agua fría, después de haberse asoleado, pueden sufrir un ahogamiento por el mecanismo de sumersión-inhibición, también llamado colapso vaso-vagal, que se da como resultado de una parada brusca de las funciones cardio respiratorias”, agregó Maltez.
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