Ya acabó para Nicaragua el Torneo Clasificatorio de Tijuana a los Juegos Centroamericanos y del Caribe, Barranquilla 2018. Durante el quinto día de competencia, Osmar Bravo en los 81 kilogramos lució deficiente ante el cubano Julio de la Cruz, mientras Greybin Mendoza perdió por decisión dividida contra el colombiano Albeiro Paredes en las semifinales de los 60 kilogramos.
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Para la Selección de Boxeo cada día en México fue como un viernes 13. En total se consiguieron solamente tres victorias de 17 combates, cuatro medallas de bronce (Kathy Esquivel en 51 kg, Scarleth Ojeda en 60 kg, Greybin Mendoza en 60 kg y Osmar Bravo en 81 kg).
Eso es un farol, con excepción de las dos mujeres, además de Mendoza y Jeffry González, despojado en su combate, los demás se vieron pequeños para una competencia de mayor exigencia. Tan así que Bravo, ganador de presea sin merecerla en lo absoluto, fue menospreciado por el cubano campeón olímpico.
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No se trata de criticar a Bravo por no haber ganado, sino es por la forma en la cual se mostró. No tiró golpes, al igual que en los Juegos Centroamericanos, tampoco reflejó el ímpetu de otros años cuando iba hacia el frente con iniciativa, todo indica que es tiempo de partir del barco.
Mendoza en su presentación ante el colombiano en las semifinales llegó a su límite, se puede decir que hizo más de lo esperado. Sin duda, fue el que más puntos ganó entre los seleccionados. Demostró que trabajando se puede mejorar.
Entretanto nos espera Barranquilla con 14 representantes, 10 de ellos sin merecerlo.