El técnico colombiano Hernán Dario “Bolillo” Gómez ha dejado claro que no irá a inventar en el Mundial de Rusia 2018 en cuanto al parado táctico de la selección de Panamá.
Gómez ha mostrado en Panamá que arma sus equipos desde atrás. La zaga y los centrocampistas son la base del equipo de Panamá en las pasadas eliminatorias y de seguro lo serán en la cita mundialista.
“Bolillo” desde su llegada a Panamá tiene un sistema 4-4-2 o de 5-4-1, siempre teniendo como referente a Gariel “Gavilán” Gómez, en la media cancha, criticado muchas veces por lo poco que corre.
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En su última comparecencia con la prensa nacional, “Bolillo” Gómez acotó que le preocupaba la condición física de Gómez, quien se recupera de una lesión.
“Hay una duda muy grande que es la de Gómez, Si él no juega, ahora tengo dudas para ver a quien utilizo en ese puesto”, dijo el colombiano. De ocho partidos en los que Gabriel Gómez fue titular en la ronda hexagonal de Concacaf, en cinco salió lesionado.
El “Gavilán”, uno de los primeros mundialista sub-20 en Panamá, también es parte clave del sistema de 5-4-1, siendo el quinto defensor panameño, al bajar de la media cancha para taponar los huecos que dejan los laterales o Román Torres cuando se da sus escapadas hacia el gol.
Gómez no alineó de titular (por enfermedad) en el partido contra Honduras que terminó 2-2, en ese duelo se vio un equipo con un parado táctico de 4-4-2 sin manejo, desordenado y sin líder.
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Luego del encuentro, el técnico panameño aceptó que “Gabriel Gómez es fundamental para las situaciones de desorden, para no dejar posibilidades al contrario”.
El estratega del equipo panameño luego de ese empate 2-2 con los hondureños señaló que “jugué sin defensas, no lo vuelvo a hacer más”.
Davis y Murrillo jugaron por las bandas, ambos muy ofensivos, y por el centro Fidel Escobar y Román Torres, según “Bolillo” fueron sus únicos defensas en este partido.
Sistema defensivo
El 5-4-1, sistema alternativo del técnico colombiano, apareció contra los mexicanos, llegando por momento a hacer un cerrojo de 6 defensas, cuando “Gavilán” o Anibal Godoy ocupaban los espacios.
Ese juego se perdió 1-0, siendo el marcador más bajo entre mexicanos y panameños jugando en el estadio Azteca.
El 4-4-2 habitual del “Bolillo” le dio frutos frente a Trinidad y Tobago, donde marcó tres goles, la máxima cantidad de dianas anotadas en toda la eliminatoria hacia Rusia 2018.
El triunfo llevó a que el colombiano saliera agresivo en casa de los Estados Unidos, con el mismo esquema (4-4-2), pero el dibujo táctico de Gómez fue borrado por los veloces atacantes estadounidenses.
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“Bolillo” entre altercados con los periodistas en la conferencia de prensa, aceptó que se equivocó y se dejó llevar por el ímpetu de la afición.
“Planteé mal el partido, me fui muy ofensivo. Regalé mucho espacio a un equipo muy veloz y nosotros tuvimos muchas dificultades”, dijo en ese momento.
El 4-0 le decía al “Bolillo” que debería cambiar para recibir Costa Rica en el Rommel Férnández, el 10 de octubre.
Contra los ticos, que llegaban clasificados a este cotejo, no cambió el sistema de 4-4-2.
Al final, fiel a su juego de no tener un 10 en la cancha, mismo que le dio resultados con Ecuador, Bolillo logró meterse por tercera vez, con selecciones distintas, a un mundial de fútbol de mayores.
El estratega ha dicho que nada cambiará para el Mundial, solo que tiene que definir nombres para la línea de zagueros.
“No inventaré en el Mundial. Cambié contra Estados Unidos y mira que nos pasó”, sentenció Gómez.
El colombiano adelantó que Roman Torres, Felipe Baloy y Fidel Escobar son fijos en la defensa, y que hay una plaza que aún no define.