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Redes sociales y Estado de derecho

El intenso debate que se ha producido sobre el ejercicio de la libertad de expresión e información en las redes sociales nos obliga a una serie de reflexiones sobre la importancia de este tema para los comunicadores comprometidos a conocer, defender y promover estos derechos.

No me refiero solo a periodistas, sino a todos los que tienen relación de una manera u otra con el público: oyente, televisivo, lectores o usuarios de medios digitales, y en los cuales incluimos comentaristas, cronistas deportivos, locutores, directores de revistas de diferentes índole o líderes de opinión en general, puesto que la libertad de expresión y la libertad de prensa no solo está restringida a un gremio, sino a todos.

Nuestra Constitución es precisa en los artículos 30 y 66 sobre la libertad de prensa y el derecho a la información sin ninguna restricción y se sostiene en el concepto de Estado de derecho que la misma Carta Magna señala en sus principios fundamentales como parte indisoluble de los derechos de los ciudadanos.

Pero esta libertad tiene sus límites, pesos y contrapesos, y está relacionada con el respeto al Estado de derecho no solo enmarcado dentro de una relación Estado-ciudadano, sino entre los miembros de la sociedad en sus diferentes segmentos.

Ha sido de mucha utilidad para este comentario haber leído un práctico manual del conocido escritor y catedrático universitario Orlando López Selva y publicado por el grupo Pro-Justicia, “Lo que usted debe saber sobre el Estado de derecho”, a través del cual nos hace reflexionar que el ciudadano es un agente activo de la democracia porque no solo se ejerce por medio del voto, sino cuando actúa como jurado, toma decisiones en asambleas, reuniones, cabildos, entre otros.

Igualmente, cuando paga impuestos, utiliza la tecnología para comunicarse, fiscaliza a través de la auditoría social, presiona para quitar o poner autoridades, supervisa o debería de hacerlo como se invierten los impuestos. Este manual nos recuerda que el ciudadano es el personaje más importante del Estado.

Insiste la publicación, que está siendo distribuida gratuitamente, que el ciudadano amparado en las leyes se involucra en actividades propositivas de toda índole, y esto constituye el paraguas por el cual miles de nicaragüenses utilizan las redes sociales para comentar, informar, participar en actividades benéficas, o altruistas, denuncias sociales, o bien recrearse o relacionarse con amigos, conocidos o familiares.

Los ciudadanos al expresarse a través de los medios tradicionales o de las redes sociales son los principales agentes de cambio de una sociedad y esto hace que la democracia no quede solo en teoría; los convierte en actores y rectores del régimen político democrático y del Estado de derecho.

Como ciudadanos debemos conocer bien nuestros derechos y obligaciones, pero sobre todo a cumplirlas para demandar lo mismo no solo al Estado sino a los medios que continúan siendo criticados por el escarnio que a veces realizan de la dignidad de las personas, dañando su honra o reputación. No puede haber una sociedad de derechos, sino está convencida de sus deberes.

El verdadero Estado de derecho se caracteriza por la armonía plena entre los ciudadanos, el respeto a las leyes, la solidaridad, el bien común, la cohesión social y hacer prevalecer la justicia como un elemento indispensable de la labor periodística.

A través de las redes sociales debemos involucrarnos más en las políticas públicas para construir una democracia participativa reconocida en las leyes y la Constitución, así como también apoyar a los sectores más vulnerables especialmente niños, mujeres, adultos mayores y convertirnos en los artífices principales del cumplimiento del Estado de derecho conociéndolo y promoviéndolo a través de los diferentes medios a nuestro alcance.
La autora es periodista.
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