El triniteño Omar Obregón fue dejado en libertad por la organización de los Bravos de Atlanta, así lo confirmó el conjunto de Clase A avanzada Florida Fire Frogs en el cual militaba. Un duro golpe para el muchacho de 24 años que soñaba con llegar a Grandes Ligas y se sintió más cerca cuando fue llamado sorpresivamente al spring training, pero ahora tendrá que transitar por un camino de piedra para enderezar sus objetivos.
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Este año, Obregón había participado en 10 partidos, mayormente como segunda base, en 32 turnos oficiales conectaba 9 imparables, un cuadrangular, un doble, ningún robo de base y un promedio de .281. Obregón estuvo en Ligas Menores desde 2012, su mejor temporada en la Liga Rookie fue en 2014 cuando se acercó a los .300 puntos (.297), posteriormente en Clase A su mejor año ocurrió cuando en 2015 bateó para .274.
En total, sus siete temporadas con los Bravos en 394 partidos, robó 61 bases, bateó para .266, conectó un solo cuadrangular, pegó 348 imparables, 13 triples, 38 dobles y anotó 178 carreras.
Duro comienzo
Leonardo Crawford no ha empezado como hubiera deseado. En su paso fugaz en Triple A recibió cuatro carreras en un tercio de episodio. No obstante, ahora que está en Clase A, en su última actuación realizada este viernes permitió dos carreras sucias en 3.1 inning, recibió tres imparables y no ponchó a nadie, dejando su efectividad en 5.11 con una victoria y dos derrotas.
Otro que aún no acelera el ritmo es el campo corto Jesús López. El joven de 23 años, quien milita en Clase A batea para .229 de promedio con un doble y tres carreras anotadas. López solamente conecta ocho imparables en 35 turnos.
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López se acercó al millón de dólares por su firma, pero solamente ha quedado en promesa. Su mejor año fue el anterior cuando finalizó con .267 en promedio.
Por otro lado, Roniel Raudes se mantiene firme en su desarrollo, al conseguir este viernes su segundo triunfo y lanzar para seis entradas sin permitir carreras.