Los principales puntos de acceso a la Universidad Autónoma de Nicaragua en Managua, que se encuentra tomada por universitarios desde hace cinco días, amanecieron este viernes con la escena común de estudiantes levantando barricadas para defenderse del asedio de las tropas de choque que durante la madrugada del viernes los atacaron.
A las 3:00 a.m., las turbas de la JS dispararon contra el recinto universitario con armas y armas hechizas. Según el relato de los estudiantes, los habitantes de la cercanías de la universidad y un grupo de ciudadanos del barrio Monimbó de Masaya, que se ha levantado contra el gobierno de Daniel Ortega desde abril pasado, evitó que los miembros de la estructura partidaria del FSLN siguieran acosando a los estudiantes.
Cinco personas fueron heridas, sin embargo. El ataque de los grupos de choque gubernamentales ocurrió, de manera paralela, al otro sucedido en la Universidad Politécnica de Nicaragua (Upoli), adonde se confirmó la muerte de dos estudiantes más. Hasta ahora, desde abril pasado, la represión gubernamental ha dejado al menos 45 muertos.
La tensión de los estudiantes es mayor. Desde hace cinco días, los estudiantes piden la destitución de los principales dirigentes de la Unión Nacional de Estudiantes de Nicaragua (UNEN), a quienes consideran corruptos y afines al gobierno de Daniel Ortega.
Junto las barricadas de adoquines, podía verse a las nueve de la mañana una movilización, que juntó esfuerzos tanto de los estudiantes de la UNAN como de otras casas de estudio. A medida que avanzaban, desde la Universidad Centroamericana hasta la UNAN- Managua, los universitarios recibían el saludo de la población, que les pitaban o le hacían un saludo desde sus vehículos.
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Mientras los estudiantes levantaban barricadas esta mañana, antes de la marcha de apoyo estudiantil, lograron desarmar a un policía, alrededor de las ocho de la mañana. Una de las estudiantes, que solicitó el anonimato, relató que el oficial vestía una chaqueta, y debajo llevaba el uniforme, cuando se acercó a las barricadas.
Al ser descubierto por los muchachos, el oficial fue cuestionado por los estudiantes. En un momento dado de la discusión, molesto, el oficial se buscó su arma, una pistola nueve milímetros. Finalmente fue desarmado y su pistola fue entregada a Marcos Carmona, presidente de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), quien la devolvió, al final de este viernes, en la sede nacional de la Policía, conocida como Plaza El Sol, en Managua.
UNAN-Managua amaneció atrincherada. Estudiantes construyen barricadas en la entrada al Polisal @laprensa pic.twitter.com/j6zVNqYVAw
— carlos daniel valle (@cvallezamora) 11 de mayo de 2018
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