Liga Primera era la única que no se daba cuenta de la represión que vivía el país. En un acto de sensatez suspendieron la final del Torneo Clausura entre Real Estelí y Diriangén de forma indefinida.
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Han estado jugando con los fanáticos. Primero anunciaron el viernes que el partido iba sin problemas el sábado en Diriamba, sin embargo, en horas de la mañana lo cambiaron para el día miércoles 16 de mayo. Pero todavía para causar más confusión volvieron a cambiar el calendario para ayer a las 4:00 p.m. y en horas de la noche del sábado cuando la Policía Nacional atacaba sin piedad a los civiles en Masaya decidieron cancelarlo hasta nuevo aviso.
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La explicación de la Liga es que Concacaf les dio hasta el 21 de mayo para que se diera a conocer al segundo representante. No obstante, para la Copa Oro, todavía no se sabía si Haití o Nicaragua estarían en el evento y a la hora del sorteo explicaban que podía ser una de las dos naciones. Algo así podría suceder si Liga Primera hace las gestiones necesarias.