El accionista y presidente de la junta directiva del Banco de Finanza (BDF), Juan Bautista Sacasa Gómez, abogó hoy por una salida pacífica a la crisis sociopolítica que afronta Nicaragua mediante elecciones anticipadas y que se castigue a quienes provocaron la muerte de más de 80 civiles.
A criterio de Sacasa la crisis actual no tiene otra salida que no sea a través del diálogo, el cual debe estar encaminado a buscar elecciones anticipadas y reformas profundas en el sistema electoral, así como justicia para los civiles que han caído en las últimas semanas.
En entrevista con LA PRENSA, Sacasa asegura que el sector bancario no ha salido ileso de esta crisis, tanto así que al menos 400 millones de dólares han salido de las arcas del sistema financiero, y aseguró que a medida que la inestabilidad se agudice el impacto económico será mayor en todos los eslabones de la economía.
Sacasa es presidente de la Junta Directiva del BDF, en cuya institución está como accionista el Instituto de Previsión Social Militar, que es propiedad del Ejército de Nicaragua y que tiene a su cargo la administración de la asistencia social de los miembros del cuerpo castrense y de sus familiares.
¿Cuál debe ser el mecanismo para encontrar una salida a la crisis sociopolítica que afronta Nicaragua?
Todos estamos apostando al diálogo nacional. El diálogo nacional tiene que funcionar. Tiene que haber un verdadero diálogo. Todos conocemos lo que está pasando en el país, hay que parar la represión. Nicaragua lo que necesita es que vuelva la paz y que comencemos como nicaragüenses todos juntos un diálogo nacional, que deberá pasar por el adelanto de las elecciones. En realidad, creo que Nicaragua ha cambiado en los últimos dos meses, es otra Nicaragua. Tenemos que tomar en cuenta el duelo y luto que hay entre las madres nicaragüenses y debemos poner todos nuestro grano de arena para que esto se calme y podamos tener la Nicaragua que todos deseamos.
El Gobierno acaba de aceptar la conformación de una comisión internacional para que se investigue la masacre de abril pasado, ¿cree que esto es suficiente?
Creo que esto es un primer paso para el proceso (de paz). Que haya aceptado una comisión internacional, que tenga la credibilidad necesaria, que nos dé la garantía a los nicaragüenses de que se van a investigar estos actos, es un gran primer paso. Luego yo tengo la certeza que los nicaragüenses, que somos todos unidos con la bandera azul y blanco, si nos ponemos de acuerdo podemos llegar a soluciones justas, sinceras, que la gente sienta ganar ganar. Siento que el país ha retrocedido todo lo que había ganado, se acabó Nicaragua, el Día de la Madre como que no existió en Nicaragua, no es un día alegre de celebración como era antes.
¿Cree que hay condiciones para adelantar las elecciones?
Creo que se debe pensar en elecciones anticipadas y por supuesto con un cambio en el Consejo Supremo Electoral. Que los nuevos miembros del Consejo Supremo Electoral tengan la credibilidad de todo el pueblo nicaragüense.
Hay sectores que están presionando por un paro nacional, ¿cree que esto podría presionar para ese cambio que demanda la población?
No estoy a favor de un paro nacional, creo que el paro afecta a todos los nicaragüenses, a los pequeños, a los medianos que viven de su trabajo….No creo que el paro nacional contribuya a la paz en Nicaragua, así lo siento yo. Lo que más contribuye es el diálogo, siguiendo los consejos sabios de la Iglesia Católica, a través del diálogo y con la presencia de ellos en el diálogo, que es una institución de más de 2,000 años, podemos lograr que esto se destrabe y sigamos adelante como nicaragüenses todos juntos.
Pero que pasa si fracasa el diálogo…¿el paro no es una opción?
Sí pudiera, pero yo no estoy de acuerdo con un paro nacional. Me acuerdo que en el tiempo del 79, cuando Somoza, (se llamó a un paro) y no funcionó. O sea que tenemos que aprender de las lecciones de la historia. La economía se nos puede retroceder a los niveles de los años cincuenta, perderemos todo lo que hemos ganado en menos de tres meses, vienen los despidos de personal, (se afectaría) la zona franca, donde hay 140 mil nicaragüenses, los señores inversionistas de zona franca ellos tienen que sacar sus productos sino pierden los contratos y ¿qué hacemos con 140 mil personas en las calles?
Como presidente de un grupo bancario, ¿cuál ha sido el impacto de esta crisis que lleva más de 40 días?
La confianza se mantiene, pero hay incertidumbre. No se puede tapar el sol con un dedo, han salido más de 400 millones de dólares de la banca. LA PRENSA sacó que de enero a marzo los depósitos habían subido 5.7 por ciento, y que del 18 de abril a esta fecha ha salido más del 6.5 por ciento por ciento. En un mes y medio ya nos volamos el crecimiento que teníamos y ya vamos decreciendo.
El Banco Central habla de más de 8,000 millones de córdobas en salida de los depósitos en cinco semanas de crisis…
No, ahora son más, son 400 millones de dólares, que son como 12,000 millones de córdobas.
¿Qué implicaría para la economía que esta crisis se extienda?
El tiempo nos está matando, creo que hay que acelerar la respuesta a esta crisis. Insto a las autoridades del Gobierno y a los que están en el diálogo, a nuestros representantes en el diálogo, a tratar de agilizar esto (las conversaciones) para que todos los nicaragüenses podamos vivir en paz, la paz y la justicia es lo importante.
¿Mira una salida pacífica a esta crisis?
Yo creo que sí, si nos ponemos todos a pensar en Nicaragua, y anteponer nuestros personales y ponemos a Nicaragua de primero estoy seguro que podemos llegar a una solución pacífica.
Por diez años funcionó el modelo de consenso, ¿cree que este no volverá a funcionar con el gobierno?
Ese modelo gobierno y empresa privada funcionó solamente y estricamente para asuntos económicos y que beneficiara a todo el país. Era para crear empleo, era para atraer inversión para Nicaragua, nunca fue para un diálogo político. A ese modelo ya no se puede volver atrás, por eso el adelanto de las elecciones es importante porque es lo que nos llevará a tener un gobierno que ya no va a necesitar que tengamos un interlocutor, porque se va a pensar en el bienestar de todos los nicaragüenses.