La ciudadanía autoconvocada mantiene tranques en Tipitapa y no piensa levantarlos, porque el fin de semana reciente fue blanco de un ataque en la entrada al colegio ubicado en el reparto Oronte Centeno, el cual dejó dos personas muertas.
El nombre de la última víctima fue enterrada la tarde de este martes y corresponde al nombre de Franklin Mercado, de 35 años, al recibir un balazo la noche del sábado, cuando iba para una venta con unos amigos.
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El disparo que lo llevó a la tumba salió de una camioneta blanca doble cabina y, según testigos, a bordo iban fuerzas de choque progubernamental.
Por su parte, su madre María Teresa Gómez cuestionó que los doctores le hayan explicado que era riesgoso retirar la bala y sin su consentimiento al final lo hayan hecho.
“A mí me habían dicho que él no aguantaba una operación, que tenía desbaratada toda la masa encefálica y que si le sacaban el proyectil se iba a morir más rápido, que no aguantaba la operación y ayer (lunes) que me llamaban que había fallecido, por qué lo operaron de emergencia, parece que para sacar la bala y no dejar evidencia”, expuso Gómez horas antes de darle el último adiós a su hijo.
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Mercado tenía cuatro hijos, el mayor de 15 años y el menor de 8 años. Su madre aseguró que ningún día participó en las protestas, que su pecado fue ir a buscar licor a las 8:00 p.m. del sábado, momento en que una camioneta atacaba a los autoconvocados de Tipitapa.
Tranques continuarán en la vía principal
Los ciudadanos de Tipitapa que mantienen trancadas varias vías principales del municipio aseguraron que continuarán en muestra de su rechazo al Gobierno, que ha reprimido al pueblo, por solo hacer uso de la protesta social.
LA PRENSA visitó Tipitapa y observó las pruebas del ataque del fin de semana. Los portones de las casas ubicadas en la zona tienen las perforaciones de balas y varias personas tienen las marcas de los charneles en sus espaldas.
Para seguridad de ellos mismos, cuando ven una camioneta acercarse a lo largo hacen de seña que bajen los vidrios para ver quienes son, porque en estos tipos de vehículos es que han ido personas a reprimirlos.
Aunque no toda la población está en las calles, de alguna manera apoyan la manifestación, al llevarles a los que mantienen los tranques comida y bebidas.
“Si ves acá está el pueblo, no hay financiamiento de ningún partido político, es la misma gente que nos ayuda. Y es que nuestra lucha es legítima, que sepa eso el Gobierno”, sostuvo un autoconvocado.
Cifra va en escala
La represión ejercida por el gobierno de Daniel Ortega sigue en aumento. Al menos 111 personas han fallecido desde el 19 de abril, cuando la arremetida se centró en los universitarios.
En una reciente visita de trabajo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), se comprobó el uso excesivo de la fuerza por cuerpos de seguridad del Estado y “de terceros armados”. También detenciones ilegales y arbitrarias, prácticas de tortura, tratos crueles, inhumanos y degradantes; asimismo, censura y ataque contra la prensa.