El miedo se ha apoderado de Las Maderas, Tipitapa. Las madres temen por la vida de sus hijos y los padres no quieren dejar huérfanos. Un grupo de paramilitares orteguistas domina desde la madrugada del lunes a este poblado, ubicado a 45 kilómetros al norte de Managua.
Estos hombres llegaron, junto a policías antimotines, a desbaratar un tranque de ciudadanos autoconvocados, quienes huyeron ante el brutal ataque con armas de fuego. “Ellos (paramilitares) no son del pueblo. Son miembros de la Juventud Sandinista de Tipitapa. Unos extraños nos vinieron a encerrar en nuestro propio pueblo”, comenta un poblador, que por miedo no da su nombre.
Así operan los grupos paramilitares del Gobierno en Managua, en imagenes
Los habitantes se han autoimpuesto un toque de queda a partir de las cinco o seis de la tarde. Varias camionetas Hilux, sin placa y con hombres armados a bordo, patrullan el poblado desde esas horas, para evitar que se vuelva levantar un tranque en la entrada de la localidad.
Donde estuvo el tranque se mantiene un grupo de paramilitares orteguistas, quienes con armas hechizas y el rostro tapado con pañoletas regulan el tráfico y detienen a algunos vehículos para inspeccionarlos. Son la ley en este pueblo.
Alcalde a la cabeza
Los pobladores indican que las turbas estuvieron, la madrugada del lunes, dirigidas por el alcalde de Tipitapa, César Vásquez, quien junto a miembros de los Consejos del Poder Ciudadano (CPC), entraron a las casas de los pobladores que apoyaban el tranque. En el enfrentamiento no hubo muertos, ni heridos.
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Unos cincuenta hombres y jóvenes, que estuvieron en el tranque, no han regresado a sus casas ante el temor de ser asesinados por las turbas orteguistas.
“No quiero que maten a mi hijo. Es el único varón que tengo. Padezco de los nervios y esto me tiene peor. Solo quiero que se vayan (los paramilitares) para que mi hijo vuelva”, comenta la madre de uno de los jóvenes que ha huido.