14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.
INSS, Nicaragua

LA PRENSA/ARCHIVO

Inestabilidad sociopolítica arrasa la afiliación a la Seguridad Social en Nicaragua

En medio de las dificultades financieras que enfrenta el INSS, los ingresos que capta a través de las cotizaciones siguen en declive por la reducción de su base de afiliados

En medio de las dificultades financieras que enfrenta el Instituto Nicaragüense del Seguro Social (INSS) —cuya reforma inconsulta y draconiana fue el detonante de la actual crisis sociopolítica que enfrenta el país desde el 18 de abril— los ingresos que capta a través de las cotizaciones siguen en declive por la reducción de su base de afiliados.

Las estadísticas de evolución del mercado laboral publicadas por el Banco Central de Nicaragua (BCN), en su más reciente informe detallan que entre noviembre del 2017 y abril del 2018 el INSS ha perdido 42,828 cotizantes. O sea, cifras anteriores al inicio de la crisis.

Lea también: ¿Por qué el INSS está en crisis? Su situación es peor de lo que parece

Situación que empeorará en la medida en que se alargue la actual crisis sociopolítica que enfrenta el país desde el 18 de abril con un saldo superior a los 150 muertos, cientos de heridos y millonarias afectaciones a la economía, que ya han provocado la pérdida de miles de empleos.

Con la reforma inconsulta al Inss, el Gobierno rompió el modelo de diálogo-consenso que por casi una década mantuvo con los empresarios. Lo hizo, al anunciar de manera unilateral una reforma a la Seguridad Social que afectaba a cotizantes activos, empresas y jubilados, por lo que la población salió a protestar y fue reprimida violentamente por la Policía y las fuerzas de choque del régimen.

Al provocar varios muertos y heridos, las expresiones de descontento fueron en aumento.

57 días de crisis

Y aunque a los pocos días la reforma a la seguridad social fue derogada, la demanda de justicia para las víctimas y el incremento de los muertos, heridos y desaparecidos, provocó una escalada que tras 57 días mantiene semiparalizadas gran parte de las actividades económicas del país, lo que en las últimas semanas ha provocado el cierre de empresas con el correspondiente despido de trabajadores.

Según el más reciente informe del BCN, solo en abril el instituto dejó de asegurar a 18,369 personas. Pero desde noviembre cuando la institución registraba 921,328 inscritos, este ha perdido 42,828 afiliados, ya que el más reciente informe del BCN refleja que en al cuarto mes del año el INSS solo reportó 878,500 inscritos.

También puede leer: ¿Cuál es el camino para salvar al Instituto Nicaragüense de Seguridad Social?

Para el economista Adolfo Acevedo es importante señalar que la caída de los cotizantes comenzó en noviembre de 2017, “como resultado del impacto de la marcada desaceleración del consumo y la caída de la inversión, que se venían reflejando desde antes en la retracción de las ventas, que venía golpeando, sobre todo a las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) y a trabajadores por cuenta propia que cotizan al régimen facultativo”.

Hasta marzo ingresos no estaban afectados

Entre noviembre de 2017 y marzo de 2018, el número de afiliados del INSS se había reducido en 24,459, equivalentes al tres por ciento de los afiliados existentes en el penúltimo mes del año pasado.
Acevedo explica que hasta marzo los ingresos del INSS no se vieron afectados en la misma proporción que la caída en los afiliados activos, ya que esta afectó especialmente a los asegurados de menores ingresos.

“Y al reducirse su peso en el total de afiliados, esto hizo aumentar automáticamente el salario promedio de los afiliados totales, es una media ponderada, junto con el ajuste normal en los salarios nominales que se produce en los primeros meses del año”, explica el economista.

Lea también: Crisis del INSS da tregua a costa de bajón en gastos médicos y prestaciones sociales

Pero la pérdida de asegurados se aceleró en abril empujada por la crisis sociopolítica que inició el 18 de ese mes.

“En esta caída influyeron tanto la desaceleración de la actividad económica que ya se venía produciendo, como el estallido de esta crisis. Es difícil decir en qué medida influyeron estos dos factores, pero es claro que el inicio y extensión de la crisis fue un serio factor agravante. Hasta abril, las mayores caídas se habían registrado en los sectores comercio y servicios personales, sociales y comunales, en los cuales existe un fuerte peso de las mypimes y de los afiliados al Seguro Facultativo”, explica Acevedo.

Crisis agudizará pérdida de afiliados

Y dadas las circunstancias es predecible considerar que en las últimas semanas la caída de afiliados se ha incrementado debido a la semiparalización económica.

“Ante esta situación de inseguridad y completa incertidumbre, los hogares responden con un comportamiento fuertemente precautorio, limitando su gasto a los elementos estrictamente indispensables, o restringiéndolo ante la pérdida de ingresos. Esto hace caer la demanda interna agregada de bienes y servicios destinados al consumo, y se refleja en la retracción de las ventas, y las empresas encuentran cada vez más difícil sostener su planilla de personal”, detalla.

Puede leer también: Urge instalar mesa de revisión de reforma al INSS

A esto, según el economista hay que sumarle “que en un contexto de inseguridad e incertidumbre radical, en el que las instituciones dejaron de funcionar y ya no son fuente de confianza, se retrae también el otro gran componente de la demanda interna, que es la inversión, en particular la inversión privada y la inversión directa extranjera”.

Acevedo advierte que “la caída de la inversión y su efecto multiplicador, tienden a deprimir más la actividad económica y las ventas”.

Antes estas circunstancias, los ingresos del INSS se afectarán.  “La entidad puede responder inicialmente reduciendo sus gastos y en marzo ya había reducido el gasto en servicios de atención medica y congelando la nómina salarial y anular por completo sus inversiones en activos no financieros, y eventualmente, las transferencias fiscales desde otras entidades del Sector Público o Financiero, incluyendo la disminución de los depósitos del Gobierno central”, dice Acevedo.

Para el economista “el peor escenario sería que la crisis llevase a afectar el pago de las más de doscientas mil pensiones, lo cual sería dramático. Ojalá que eso jamás llegue a ocurrir”.

El detalle de la pérdida de afiliados

El informe de la evolución de las estadísticas del mercado laboral publicadas por el Banco Central de Nicaragua (BCN) detalla que entre noviembre del 2017 y abril de 2018 el Instituto Nicaragüense del Seguro Social (INSS) ha perdido 42,828 cotizantes, dicha merma ha afectado principalmente al comercio.


Según el informe del BCN, la reducción de afiliados se distribuye así entre los sectores económicos:

  • El sector comercio ha perdido 28,892 cotizantes activos
  • Servicios comunales, sociales y personales 14,639
  • El sector financiero 3,578
  • La construcción 1,725
  • Transporte, almacenamiento y comunicaciones 1,721
  • Minas y canteras 179
  • En dicho período los sectores que han sumado asegurados son únicamente: la industria manufacturera con 6,087 afiliados
  • El sector agropecuario, silvicultura, caza y pesca, 1,712 y minas y canteras 107 asegurados.

878,500 afiliados reportó el Instituto Nicaragüense del Seguro Social (INSS) hasta abril, según reporte de la evolución de estadísticas laborales que publica en Banco Central de Nicaragua (BCN).

Economía INSS Nicaragua archivo

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí