El gobierno de Daniel Ortega atribuye a delincuentes la masacre de una familia, quemada dentro de su vivienda este sábado en el barrio Carlos Marx, de Managua, pero omite que andaban acompañados por la Policía Nacional, que tiene un plan de “limpiar” las barricadas que la población ha levantado para protegerse de la represión.
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La versión oficial se auxilia de recursos que los medios de comunicación y la población han publicado en las redes sociales, pero los orteguistas y familiares del caudillo editan los videos para usarlos a su favor.
Este mismo sábado en la mesa del diálogo nacional, el jefe de la bancada del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) en la Asamblea Nacional, Edwin Castro, quiso librar de responsabilidades a la Policía, asegurando que fueron delincuentes los que quemaron la casa y que la familia calcinada eran “reconocidos sandinistas en el barrio”, lo que fue negado por los sobrevivientes.
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Castro se atrevió a usar un fragmento de la noticia que transmitió un canal de televisión nacional, en la que se escucha el relato de uno de los sobrevivientes, pero Castro omite la parte en que responsabiliza a la Policía y a paramilitares armados.
El hijo de Ortega y Rosario Murillo, vicepresidenta del país, Juan Carlos Ortega, también publicó ese fragmento de la noticia en su cuenta de Twitter. Más de uno le reprochó que solo mostrara una parte, lo que detrás tenía una clara intención política.
Asedio a población
En los últimos días, el sector del barrio Carlos Marx ha sido asediado por la Policía y las fuerzas paramilitares, por lo que la población levantó barricadas para resguardarse.
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Estos vecindarios colindan con la Universidad Politécnica de Nicaragua (Upoli), donde estuvieron atrincherados los estudiantes desde el 19 de abril hasta los primeros días de junio, y recibieron el apoyo de la población de ese sector.
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El canciller Denis Moncada, quien encabeza la representación del Gobierno en la mesa de Diálogo, también intentó deslindar de responsabilidades al Gobierno y a la Policía. Leyó un comunicado de la Dirección General de Bomberos de Nicaragua, en la que relatan que durante su labor de sofocar el incendio fueron asediados por “delincuentes encapuchados”; sin embargo, esta institución nunca llegó al barrio Carlos Marx, sino que fue el Benemérito Cuerpo de Bomberos, integrado por voluntarios, los que sofocaron el fuego. En las imágenes transmitidas por los medios de comunicación se observa que la población colabora con los miembros del Benemérito.
Familiares desmienten
Los sobrevivientes de esta masacre del 16 de junio han insistido en que no simpatizaban con ningún partido político y señalan como responsables a la Policía y a los paramilitares.
Sin embargo, el gobierno de Daniel Ortega, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, reportó como responsables a los estudiantes que protestan en su contra, enviando como prueba las capturas de una supuesta página de Facebook en la que aparecen amenazas supuestamente de los estudiantes, junto con las fotos en vida de las personas que fueron calcinadas el sábado.
Sin embargo, hasta en el entierro de sus seres queridos, los deudos acusaron al Ejecutivo.
62 días se cumplen este lunes desde que iniciaron las protestas contra el gobierno de Daniel Ortega, que han sido reprimidas por la Policía y las fuerzas paramilitares. Los asesinados suman 170.