Con una “final” Colombia-Polonia, hoy en Kazán (12:00 m.) por la llave H, se cierra la segunda jornada de la fase de grupos del Mundial-2018, que incluye en su programa un duelo de estilos en el Japón-Senegal de Ekaterimburgo (9:00 a.m.) y un desparejo a priori Panamá-Inglaterra por la zona G en Nizhni Nóvgorod (6:00 a.m.).
Hundir a Kane
Panamá hizo su estreno absoluto en Copa del Mundo contra el candidato al título Bélgica y se llevó una goleada en contra de 3-0.
Ahora le vuelve a tocar un peso pesado como Inglaterra, que debutó con victoria agónica 2-1 ante Túnez con un doblete de su capitán Harry Kane.
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Partido de difícil pronóstico para los chicos del técnico colombiano Bolillo Gómez, que deben detener ante todo al Huracán Kane sin dar espacio al resto de las estrellas de la cotizada Premier League.
“Es un jugador estupendo, que aparte de estar en un gran club, lo quieren los mejores de Europa. Lo que queda es evitar que tenga muchas ocasiones para anotar. Es un jugador de área y hay que estar muy pendientes a él”, advirtió el portero canalero Jaime Penedo.
Pelea directa
Ambos ganadores en el debut, japoneses y senegaleses protagonizan un choque de líderes del Grupo H cuyo vencedor quedará golpeando las puertas de los octavos.
Los nipones sorprendieron 2-1 a Colombia en un partido que cambió de rumbo a los tres minutos por la expulsión del cafetero Carlos Sánchez por una mano que concedió un penal, pero cuando el partido iba 1-1 asumieron la responsabilidad y sellaron el triunfo.
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Más difícil la tuvo Senegal, que con su destreza técnica y sentido de la oportunidad terminó saltando el dispositivo de Polonia y festejó una victoria 2-1, la primera africana en el torneo en aquel momento.
Dos estilos, un mismo objetivo. Bonito enfrentamiento para mirar por TV con un premio grande como recompensa.
Sin margen de error
Colombia llegó a Rusia-2018, tras ser la revelación de Brasil-2014 haciendo cuartos de final, con un plantel con muchas perlas y algunas superestrellas confirmadas como James Rodríguez y Radamel Falcao.
Tras el despiste nipón, los pupilos de José Pekerman necesitan de sus superhéroes para sobrevivir a un grupo que se anuncia cerradísimo, y que ahora los pone a prueba ante el músculo polaco.
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Pero Robert Lewandowski, temible goleador del Bayern y compañero de James en Múnich, tampoco tiene muchas más escapatorias que ganar. Tras su excelente Eurocopa-2016 en la que cayó en cuartos por penaltis ante la futura campeona Portugal, los polacos creen en su potencial, en un duelo de necesitados que juegan caminando por la cornisa en una verdadera “final”.