No sabemos qué ocurrirá en el futuro de Jonathan Loáisiga, pero quizá resulte natural verlo con optimismo después de lo mostrado por este chavalo que está lanzando como todo un big leaguer.
Dueño de un repertorio eléctrico y una serenidad digna de un veterano, Loáisiga ha causado asombro por el nivel de dominio que ha conseguido luego de tres aperturas con los Yanquis.
Mejoró el comando de sus envíos, tiene una gran frecuencia ponchadora (11.57) y los contactos que le han hecho, han sido débiles y sobre todo por el piso (15 rolas), porque casi no levanta la bola.
Considere que Loáisiga ha enfrentado hasta el momento a 57 bateadores y además de las 15 rolas, ha ponchado a 18. Solo ahí hay 33 bateadores dominados sin pronunciar palabra. Eso es brutal.
Sí, pero ¿qué pasará con él en los próximos días? No es solo el regreso de Masahiro Tanaka, quien ya está haciendo bullpen. Los Yanquis también subieron al azteca Luis Cessa, quien abre hoy.
Y peor aún, la prensa de Nueva York insiste en que los Yanquis tienen que ir al mercado y adquirir un brazo de calibre para los playoffs, si es que quieren ganar la Serie Mundial.
J. A. Happ de los Azulejos, Cole Hamels de Texas, Chris Archer y Blake Snell de Tampa y Jacob deGrom de los Mets son mencionados con insistencia por la prensa neoyorquina como candidatos.
Luego de que Justin Verlander impactara del modo que lo hizo con Houston el año pasado, los equipos que puedan ir al mercado tras un brazo de esos que causan desequilibrio en la batalla.
En ocasiones, los equipos salen con unos cambios que nadie había considerado, pero que resultan efectivos. En los Yanquis, aún sin cambiar, tendrán que tomar decisiones duras con su rotación.
Tanaka está por volver. Si Cessa luce bien hoy, será al igual que Domingo Germán (2-4 y 5.40) y Loáisiga (2-0 y 1.93) un candidato al quinto puesto en la rotación, en la que hay brazos establecidos.
Luis Severino, quien anoche estuvo brutal en ruta a su victoria 12, es el líder del staff, más CC Sabathia, Sonny Gray, Tanaka y Germán. Ahora está Loáisiga haciendo notar, más Cessa, que viene hoy.
Por ahora es difícil prever lo que ocurrirá. Lo único que le queda a Loáisiga es seguir brillante como lo ha hecho, porque por lo demás, como él dice, son cosas que no puede controlar.