Tres guardas de seguridad que cuidaban la propiedad del Grupo Coen, ubicada sobre la pista Jean Paul Genie, fueron retenidos por oficiales de la Policía que llegaron en una patrulla a dicho bien inmueble a eso de las 6:30 de la mañana de este domingo 1 de julio de 2018.
Hasta el cierre de edición de LA PRENSA, se desconocía el paradero de los vigilantes, informó Gustavo Valle, dueño de la empresa de seguridad para la que trabajan los guardas.
La propiedad del Grupo Coen, que mide 14 manzanas, fue invadida por unos veinte hombres armados y encapuchados la mañana del viernes 29 de junio.
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Cuando los afectados pusieron la denuncia, la Policía dijo que no podía intervenir en problemas de propiedad y los mandó a los juzgados, pero el sábado 30 la propiedad fue liberada por personas que participaron en la Marcha de las Flores, después que los paramilitares tomatierras dispararan contra los manifestantes, asesinando a un joven de 23 años y lesionando a ocho personas más.
Posteriormente los guardas tomaron posesión de la propiedad ese día.
“El Grupo Coen solicitó el personal y se mandó. Hoy nos enteramos que una patrulla de la Policía se los llevó y no tenemos más detalles de su paradero. El jefe de operaciones está en El Chipote esperando información de ellos”, dijo Valle escuetamente a LA PRENSA.
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La invasión a las propiedades privadas valiosas se ha intensificado en junio ahora con grupos armados, aunque iniciaron en mayo en Chinandega, León, Matagalpa, Estelí y Managua.
Los tomatierras empezaron a operar después que el Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) rompió relaciones con el gobierno de Daniel Ortega, a raíz de las protestas ciudadanas y las más de 224 personas asesinadas en los tres meses de manifestaciones.
Valle dijo que no meterá más guardas de seguridad a la propiedad del Grupo Coen hasta que la Policía le diga si hay un problema con cuidar ese terreno. “No queremos meter más gente, de lo contrario se la van a llevar”, recalcó el dueño de la empresa de vigilancia.
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Por su parte el presidente de la Comisión Nacional Ganadera de Nicaragua, René Blandón, lamentó que se esté dando “una cacería de tierras” y que la población esté en una indefensión total.
“No hay Estado de Derecho porque uno llega a la Policía a poner la denuncia y lo que te dicen es que no pueden hacer nada porque están reconcentrados”.
Blandón prefiere no creer que esta es una nueva forma de confiscación y que se resolverá al concluir la crisis sociopolítica que vive el país desde el 18 de abril, ya que esto tarde o temprano se resolverá.
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“No podemos seguir así con esta anarquía increíble, aquí nadie cree ya en la Policía, hasta da miedo ir a poner la denuncia porque no sabés si te van a dejar detenido. Vivimos en un Estado de terror y prefiero ser optimista y pensar que esto se resolverá cuando concluya esta crisis que en tres meses ya hizo retroceder la economía tres años”, advirtió Blandón.