Sujetos encapuchados que se movilizaban a bordo de una camioneta Hilux, color azul, tiraron este jueves el cadáver de Roberto Castillo Cruz a un basurero clandestino en el barrio Ana Virgen Noble, en Jinotepe, Carazo, informaron los pobladores del sector.
A Castillo Cruz, quien trabajaba en la alcaldía municipal, hombres encapuchados le habían asesinado la madrugada del pasado 25 de junio a su hijo Christopher Roberto Castillo Rosales, de 23 años. El joven recibió dos impactos de bala, uno en el cuello y otro en la espalda.
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El cuerpo de Castillo Cruz, quien era miembro activo del Frente Sandinista en Jinotepe, fue encontrado por los pobladores entre la basura, cubierto por un plástico negro. El hombre vestía un pantalón negro, faja blanca y una camisa manga larga azul.
Los pobladores también comentaron que Castillo Cruz tenía unas guanteletas negras y se le notaban ataduras en sus manos. Hasta el momento se desconoce la causa de su muerte, pero se presume que fue víctima de un disparo aparentemente realizado por paramilitares.
Secuestran a policía
Por otro lado, la Red de Comunicadores, aliados del Frente Sandinista, de Carazo, denunciaron el secuestro y tortura de la oficial de policía Yadira Calero, así como el asesinato de su cónyuge.
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Miembros de los ciudadanos autoconvocados refieren que nada tienen que ver con estos hechos delictivos y, aseguran, que el gobierno lo que pretende es involucrarlos para luego procesarlos judicialmente.
Los ciudadanos jinotepinos reportaron después del mediodía de este jueves una balacera por el sector del barrio Cruz de Guadalupe y Hertylandia.
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