La iglesia Católica denunció este sábado un nuevo acto de profanación. Esta vez fue a la capilla de Nuestra Señora del Carmen, ubicada en el barrio Villa El Carmen, en Jinotega, dos días después de que el presidente Daniel Ortega acusara a los obispos de “golpistas” y de alentar “sectas satánicas”.
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“La noche del viernes 20 de julio sujetos desconocidos profanaron la capilla de Nuestra Señora del Carmen, perteneciente a la parroquia Sangre de Cristo”, informó la Diócesis de Jinotega a través de un comunicado.
Pobladores aledaños a la iglesia dijeron no haber visto nada, sin embargo los desconocidos ingresaron al templo y “profanaron el Santísimo Sacramento del Altar que estaba resguardado en la capilla”, aseguró la Diócesis jinotegana, que además divulgó fotografías en las que se observa una ventana forzada y objetos sagrados tirados en el suelo.
Además hicieron sus necesidades fisiológicas en varios de los copones y robaron la custodia donde se coloca la hostia consagrada, así como un equipo de sonido y una alcancía.
Con este, al menos siete templos católicos han sido profanados en toda Nicaragua en estos tres meses de crisis sociopolítica en el país.
Los ataques a la iglesia católica en la ciudad iniciaron con la difamación a monseñor Eliar Pineda Úbeda en abril pasado, posteriormente continuaron las amenazas hacia Pineda, por parte de paramilitares encapuchados. Durante una caravana que realizaron los orteguistas por el Día de la Alegría, llegaron a intimidar a los feligreses que se encontraban en la iglesia Nuestra Señora de Los Ángeles, donde Pineda realiza homilías diariamente.
Ortega acusó a los obispos
El pasado jueves, durante la celebración del 19 de julio, Ortega acusó al los obispos y sacerdotes nicaragüenses de “golpistas” y aseguró además que los templos han sido usados para guardar armas y promover actos de violencia. “No vamos tampoco a irrespetar a los obispos, a pelear con los obispos, pero por la verdad murió Cristo, y como cristianos estamos obligados a decir la verdad, y a pedirle a los señores obispos a que rectifiquen y no estén alentando a estas sectas satánicas, golpistas, asesinas”, dijo Ortega, ante sus simpatizantes en la Plaza Juan Pablo II.
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“Oremos junto a Pío XI, por los actos de profanación contra el Santísimo Sacramento que enemigos de la Iglesia han cometido”, invitó el clero del norte de Nicaragua.
Antes de la profanación, la jurisdicción católica de Jinotega había invitado a sus fieles a que asistir “a las distintas eucaristías en toda la Diócesis, donde se hará el rito de consagración”.
En mayo, Ortega invitó a los obispos a ser mediadores en un diálogo nacional entre el Gobierno y representantes de diversos sectores nicaragüenses, para poner fin a la crisis, sin embargo el presidente dijo sentirse incómodo con las labores humanitarias del clero durante las escenas violentas.
Cardenal Leopoldo Brenes: “Seguimos creyendo en el diálogo”.