Este 8 de agosto cumple 90 años de fundada la Academia Nicaragüense de la Lengua, reconocida por la Real Academia Española el 31 de mayo de 1928 y aprobada por Decreto Ejecutivo del gobierno de Nicaragua el 8 de agosto de 1928. La personalidad jurídica le fue otorgada por ley del Congreso de la República el 2 de febrero de 1929.
Los miembros fundadores de la Academia fueron los ilustres intelectuales doctor Carlos Cuadra Pasos, monseñor José Antonio Lezcano y Ortega, primer arzobispo de Managua, el doctor Luis H. Debayle, el doctor Pedro Joaquín Chamorro Zelaya, el doctor Alfonso Ayón, el doctor Manuel Maldonado y el doctor Francisco Paniagua Prado.
Desde su fundación la Academia, siguiendo los propósitos que condujeron a su establecimiento trabaja “por la defensa, unidad e integridad del idioma y vela por su natural crecimiento según los cauces propios de la lengua”.
El decreto creador de la Academia establece la obligación del Estado de asignarle recursos en el Presupuesto General de la República. La Academia tiene el rango de organismo de consulta del Ministerio de Relaciones Exteriores en asuntos lingüísticos.
La Academia Nicaragüense fue la décima quinta Academia fundada en Hispanoamérica por la Real Academia Española. Hoy día existen 23 academias que, coordinadas por la Real Academia Española, integran la Asociación de Academias de la Lengua Española (Asale).
Nuestra Academia ha participado, en conjunto con sus academias hermanas, en la elaboración de obras como el Diccionario Panhispánico de Dudas (DPD); el propio Diccionario de la Lengua Española (DEL), el Diccionario de Americanismos y la Nueva Gramática de la Lengua Española. A nuestra Academia se le encargó la coordinación de la edición conmemorativa en homenaje a Rubén Darío, bajo el título de “Rubén Darío: del símbolo a la realidad. Obras selectas”.
Actualmente, la Academia Nicaragüense cuenta con 24 miembros de número; 21 miembros correspondientes y 13 miembros honorarios. Hasta la fecha ha editado 41 números de su revista LENGUA, que generalmente comprende secciones dedicadas a lingüística, estudios darianos, mesas redondas sobre determinados autores nacionales, artículos, ensayos, reseñas y notas. Anualmente publica el Repertorio Dariano, con ensayos sobre la obra de nuestro “padre y maestro mágico”, escritos por autores nacionales y extranjeros.
Los directores de la Academia han sido, en orden cronológico: el doctor Carlos Cuadra Pasos, monseñor José Antonio Lezcano y Ortega, don Pablo Antonio Cuadra, el doctor Jorge Eduardo Arellano y el actual, licenciado Francisco Arellano Oviedo.
La Academia ha hecho aportes importantes al estudio de los matices y las modalidades propios del español que hablamos los nicaragüenses, con libros como El habla nicaragüense de Carlos Mántica Abaunza; El Diccionario del Español de Nicaragua (DEN) del licenciado Francisco Arellano Oviedo; El Atlas Lingüístico de Nicaragua, nivel fonético, de la doctora María Auxiliadora Rosales Solís, Premio Real Academia Española 2009 y obras de los doctores Fernando Silva y Jorge Eduardo Arellano.
Su intensa labor editorial ha hecho posible la publicación de 125 títulos de escritores nicaragüenses, que comprenden libros de poesía, narrativa y ensayos de los más relevantes cultivadores de las letras nicaragüenses. Pese a lo limitado de sus recursos mantiene siete secciones editoriales: I) Crítica y Ensayo; II) Naturaleza; III) Homenajes; IV) Discursos de ingreso; V) Lexicografía y lingüística; VI) Serie Rubendariana; VII) Creación y Raíces.
Sin duda, la trayectoria de la Academia Nicaragüense de la Lengua, en sus noventa años de existencia, ha sido fecunda contribuyendo al enriquecimiento del cultivo de nuestra lengua y de nuestra cultura. Figura entre las más activas academias de nuestro continente.
El actor es jurista y académico.