Pese a la supuesta normalidad en el país como intenta hacer pensar el Gobierno, los agentes de tránsito designados a regular las vías en Managua, han salido a las calles acompañados al menos de un oficial que porta un fusil AK o una escopeta.
Aunque esto grupos de policías de tránsito han sido vistos en las calles imponiendo multas, con más frecuencia se observan durante las horas picos en los diferentes semáforos de la capital.
Para el abogado del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Gonzalo Carrión esta es “la demostración fehaciente que el país no está normalizado”.
Policías de tránsito con fusiles Ak o motorizados con armas de fuego largas, no tiene nada que ver con un país normal y más bien “causan terror, causan pánico”, entre la población y a criterio de Carrión lo que buscan con esto es , “meter miedo”.
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Por su parte Marcos Carmona, secretario ejecutivo de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) , refirió que personalmente en ha visto a grupos de agentes de tránsito con hasta siete integrantes y algunos de ellos portando armas de alto calibre.
“Al final no sabemos si es para intimidar a la población o dar seguridad vial. Están tan desacreditados ante la población que temen una reacción fuera de lo normal”, dijo Carmona.
Carrión no descarta que la Policía retome “la jornada de recolecta de impuestos (…) han perdido en tres meses me imagino que están ansiosos de volver a esa normalidad de recaudar plata por la vía de la multa (…) si antes a los conductores les tocaba lidiar contra la palabra del policía, ahora es con la voz de la intimidación del fusil”.
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millones de córdobas, aproximadamente tenía previsto el Gobierno recaudar en concepto de multas por infracciones de tránsito , un 10.52 por ciento más comparado con las expectativas del 2017.