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Teodora Margarita López presentó denuncia sobre la detención arbitraria de su cónyuge Enrique Cuevas, ante el abogado del Cenidh, Braulio Abarca. LA PRENSA/CORTESíA

Policía de León detiene a vendedor ambulante por portar banderas azul y blanco

Teodora Margarita López Cuevas denunció ante el Cenidh que desde el 9 de septiembre la Policía detuvo a su esposo en el parque San Juan de donde saldría una marcha de los autoconvocados

Unas diez banderas azul y blanco encontradas en la casa de Luis Enrique Cuevas se convirtieron en la prueba del delito, por lo cual la Policía pretende procesar al vendedor ambulante de banderas, pañoletas y cintillos como medio de trabajo para sostener a su familia.

Y por ese delito de guardar esa cantidad de banderas, justamente en el Mes de la Patria, Cuevas fue remitido de León a las celdas tenebrosas del Chipote.

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Teodora Margarita López, Cuevas, denunció ante el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) que desde el domingo 9 de septiembre, la Policía de León detuvo a su esposo, en el parque San Juan de donde saldría una marcha de los autoconvocados a los que ha seguido durante estos casi cinco meses como parte de su negocio.

López únicamente recuerda que uno de los policías de una de las patrullas solo ordenó a otro “traeme a los vende banderas” y al que se llevaron fue a su cónyuge, por lo que ella corrió a la delegación policial, pero mientras ella permanecía en busca de información sobre la arbitraria acción policial, los agentes catearon su casa de donde dijo se llevaron “unas diez banderas, unas pitoretas (bubucelas), una tablet, mi cédula, todo se llevaron, me dejaron la casa echa un desastre”.

El lunes Cuevas fue trasladado a Managua y a ella los agentes de la delegación policial de León, solo le dijeron “vaya a pedir información al Chipote”.

“Nos andamos ganando la vida como cualquier vendedor, buscando el pan de cada día”, alegó López, quien dijo que cinco personas dependen de Cuevas.

El abogado del Cenidh, Braulio Abarca, manifestó que el Gobierno continúa ejerciendo terrorismo de Estado, “es absurdo que la Policía esté deteniendo a personas por el hecho de vender banderas”.

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Señaló Abarca que  la Policía le violenta los derechos humanos al detenido, no solo por la detención arbitraria, sino porque hasta ahora no lo ha puesto a la orden de un tribunal.

El Cenidh acompañará a López a presentar un recurso de exhibición personal a favor de Cuevas y también a que exija su libertad de inmediato.

Abarca dijo que ya hay antecedentes de detenciones de vendedores ambulantes durante las manifestaciones de los autoconvocados como el de un vendedor de algodón. Y recordó que en Managua también hubo un asesinato de una persona que vendía camisetas azul y blanco en la zona entre la Universidad de Ingeniería y la Universidad Centroamericana.

Otra detención arbitraria

Mientras Brenda Reyes, externó su preocupación  por la suerte de su padre  Gregorio Reyes, de 69 años y de su hermano Léster Braudilio Reyes Pastrán. Ambos fueron arrestados también de forma arbitraria, el 5 de septiembre, en sector del barrio El Calvarito, León, de donde los trasladaron  también al Chipote.

Según dijo en el Cenidh, la denunciante el delito  “fue haber portado una bandera azul y blanco”, aunque aclaró que lo único que les encontraron fueron unas chimbombas color blanco cuya leyenda era “de mi bautizo”.

Reyes aseguró que esta es  la segunda detención que sufren sus parientes, pues el 27 de julio fueron detenidos en su casa, cuando permanecieron tres días detenidos y los liberaron al no poderles documentar cargos. Y alegó que en  ningún momento sus parientes “son delincuentes” como asegura ya los presentó la Policía ante los medios de comunicación oficialista cuando ella observó que  su padre presentaba una herida en la frente  lo cual le preocupa porque es diabético.

En el caso de su hermano, ella señala que las causas que le imputan durante esas fechas él estaba en cama porque había sufrido un accidente de tránsito y atendido en una clínica previsional por problemas en la columna y como pruebas están esos dictámenes médicos.

“El hecho de portar una bandera no nos hace criminales”, insistió Reyes quien manifestó que al inicio sus parientes participaron en marchas.

Abarca recordó que en el contexto actual en Nicaragua ese organismo contabiliza más de dos mil detenciones arbitrarias lo que indica violaciones graves a los derechos humanos.

En este caso el Cenidh presentó un recurso de exhibición personal a su favor y el Tribunal de Apelaciones de Managua (TAM) mandó a exhibir a los dos detenidos, que la Policía no ha cumplido.

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