La Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), visitará Costa Rica a finales del presente mes, con el fin de realizar un diagnóstico de la situación de los nicaragüenses refugiados en Costa Rica.
Marcos Carmona, secretario ejecutivo de la CPDH, expresó preocupación por la cantidad de nicaragüenses que se han visto forzados a huir del país, ante el riesgo inminente para ellos.
Y destacó la muerte de Bernardo Silva Palacios, oriundo de Masaya, quien hasta donde sabe iba enfermo de gripe quien al permanecer a la intemperie y no contar con asistencia médica desarrolló una neumonía.
Por falta de recursos la familia debió sepultar los restos de Silva en territorio costarricense, dijo Carmona.
Con el diagnóstico, según Denis Darce, funcionario de CPDH, buscan solicitar medidas por parte del gobierno costarricense en cuanto a la agilización de trámites de asilo y refugio, el cual no es expedito, pero se complica aún más por la cantidad de personas.
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Se estima que más de 23 mil nicaragüenses han buscado refugio en Costa Rica. Hasta ahora el gobierno de Carlos Alvarado, ha emitido una sola resolución que otorga asilo político a un nicaragüenses, en este caso fue beneficiado el secretario ejecutivo de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH), Álvaro Leiva Sánchez, tras demostrar la persecución de la que era víctima.
“Cabe resaltar que el asilo político es una protección especial para personas que pertenecen al rango diplomático o han participado en movimientos políticos en su país de origen. Mientras que las solicitudes de refugio son tramitadas y resueltas por la Dirección General de Migración y Extranjería”, dice la nota oficial del Gobierno costarricense que hace referencia al asilo otorgado a Leiva Sánchez.
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El secretario ejecutivo de la CPDH aplaudió el hecho de que Leiva haya sido beneficiado con el asilo político por parte del gobierno del vecino país, “porque en Nicaragua no se le garantizaba su seguridad”. Y recordó que hay varios casos de defensores que han abandonado el país debido al asedio que enfrentan por parte del orteguismo.
Carmona llamó al régimen Ortega Murillo a garantizar seguridad para que los nacionales que han debido abandonar el país en desplazamiento forzado ante amenazas de encarcelamiento o muerte, puedan retornar a su patria.