CONTENIDO EXCLUSIVO.
CONTENIDO EXCLUSIVO.Nicaragua cumplió este viernes 35 días sin información sobre la delicada situación financiera y monetaria del país, luego que el Banco Central de Nicaragua (BCN) decidiera cesar a partir del 7 de septiembre la publicación sobre la evolución de los depósitos, la circulación de dinero, la acumulación de reservas internacionales, la emisión de dinero, la brecha cambiaria, entre otros.
Aunque el BCN puede justificar el cese de las publicaciones como medida para evitar el pánico, ante la debacle económica como consecuencia de la crisis sociopolítica que estalló el 18 de abril, economistas y representantes del sector privado aseguran que esconder las cifras lo que provoca es más desconfianza e inseguridad.
Lea también: Banco Central de Nicaragua decide ocultar la debacle económica
“En muchos casos lo que provoca el ocultamiento de información es lo contrario, lo que provoca es que la gente tenga más desconfianza, se sienta más insegura y que entonces en vez de ayudar a que no salgan recursos lo que hacen es empujar a que salgan más recursos”, aseguró el presidente del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), José Adán Aguerri.
Según Aguerri, “cuando el secretismo se da, cuando el ocultamiento se da, lo normal es que la gente tienda a tener desconfianza y lo que hacés cuando tenés desconfianza, es protegerte y la manera de protegerse que hemos visto en estos meses es la decisión que han tomado, en el caso del Sistema Financiero, los depositantes es de no tener los recursos en el país y eso no le conviene a nadie”, explicó Aguerri.
Genera más incertidumbre
Por su parte, el economista y exdiputado Enrique Sáenz señaló que “una de las bases del libre mercado es la disponibilidad de información para los agentes económicos” y que “el ocultamiento de esta por parte del Banco Central lleva a la pregunta elemental: ¿cuál es la razón para ocultarla?, ya que en las condiciones actuales cualquiera se responde que la razón es que se trata de malas noticias”.
Según el Cosep, para evitar que los ahorrantes sigan retirando los depósitos de los bancos tiene que lograrse un “acuerdo político” que ponga fin a la crisis, que en 178 días ha dejado más de quinientos muertos, miles de heridos, cientos de encarcelados y desaparecidos y más de mil millones de dólares en afectaciones económicas.
Puede leer también: Salida de depósitos no da respiro a la banca en Nicaragua
De no alcanzarse este acuerdo la fuga de estos recursos puede continuar y esto reduce la capacidad financiera de los bancos par otorgar crédito, lo que a su vez provoca un efecto transversal en toda la economía.
“Porque empezás a reducir los créditos, digamos que primero en los sectores de servicio, pero en el camino no vas a dejar de afectar a los sectores productivos y eso entonces se convierte en una situación que requiere de esa respuesta política a ese acuerdo que hemos estado señalando”, advirtió Aguerri.
Afecta a toda la economía
Antes de que el BCN decidiera ocultar la información monetaria y financiera, los números reflejaban que más de mil millones de dólares habían salido de la banca, otros 3,415 millones de córdobas habían dejado de circular en el mercado, y peor aun que el máximo emisor estaba quedando sin reservas internacionales netas ajustas para afrontar la demanda de dinero de los agentes económicos.
Al ocultar la información, según Sáenz, además de afectar directamente al sistema bancario, que es uno de los eslabones más sensibles de la economía, también hay repercusiones en la economía en su conjunto porque se refuerza la desconfianza y con ellas las tendencias recesivas.
También puede leer: Banco Mundial proyecta para Nicaragua dos años de contracción económica por crisis
Además, este tipo de decisiones confirma que el país no ha vuelto a la normalidad y refuerza el clima de incertidumbre y desconfianza entre los agentes económicos.
Dan palos de ciego en gestión económica
“¿Qué inversionista va a confiar en una economía donde las autoridades actúan en secreto? ¿Quién va a comprar los famosos bonos de estabilización que ofrece el Banco Central y los bonos del Ministerio de Hacienda? En definitiva, revela que al igual que dan palos de ciego con la represión indiscriminada, también dan palos de ciego en la gestión de la crisis económica”, afirmó Sáenz.
Otros economistas consultados coinciden en que la decisión del BCN es totalmente equivocada, porque genera desconfianza, ya que la población percibe que si esconden algo es porque es malo.
También puede leer: FMI: Nicaragua volverá a crecer 4% hasta 2022 y recuperación de la crisis será lenta
El Cosep, en tanto, insiste que “pretender que al ocultar la información que siempre se ha publicado con determinada periodicidad se frenará el deterioro de la economía, es simplemente una forma equivocada de entender que no es así que se frenará el deterioro económico”, sino con un acuerdo político que resuelva el origen de la crisis, que es político, y no económico.
Aunque el BCN oculte la información, Aguerri considera eso no cambia lo que “todos sabemos” y que ha sido evidente en los últimos días cuando el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, diferentes organismos internacionales y la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides) han coincidido en los pronósticos de que este año la economía se contraerá alrededor de 4 por ciento.
Levantan información
Para compensar el bloqueo de la información oficial impuesto por el Banco Central de Nicaragua, el Consejo Superior de la Empresa Privada junto a la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides) decidieron realizar una encuesta mensual de las actividades económicas del sector privado. Hace algunos días fue presentado el primer informe que incluyó información de julio.
Lea también: Expectativas de inversión no son “alentadoras” en Nicaragua
“En este momento estamos levantando la información de agosto y septiembre para mantener a las empresas con la información oportuna”, dijo el presidente del Cosep, José Adán Aguerri.
Además de indicadores de inversiones, empleo y exportaciones, los próximos informes incluirán también indicadores financieros y de crédito.