El Consulado General de Costa Rica en Nicaragua consultó a las autoridades nicaragüenses sobre la presunta detención y condición jurídica del ciudadano Allan Cordero Ocón, de 40 años, de nacionalidad costarricense, informó la vicepresidenta del país vecino, Epsy Campbell.
Cordero fue detenido junto a su pareja, la ciudadana estadounidense Marcela Martínez Guzmán, cuando se disponían a participar en la marcha “Unidos por la Libertad” contra el régimen de Daniel Ortega. “Aún no hemos recibido respuesta”, afirmó Campbell.
Hemos consultado a las autoridades nicaragüenses, sobre la presunta detención y condición jurídica del ciudadano costarricense Allan Cordero Ocon, en el marco de las manifestaciones ocurridas en Managua. Aún no hemos recibido respuesta.
— Epsy Campbell (@epsycampbell) 14 de octubre de 2018
La Policía Orteguista brindó este domingo una lista de los 38 detenidos de los cuales ocho fueron liberados. Cordero, quien es piloto de aviación, no aparece en la lista. Sus familiares, sin embargo aseguran que se encuentra detenido.
Óscar Camacho, cónsul general de Costa Rica en Nicaragua, explicó que de confirmarse la información, se procederá a solicitar una visita al centro de detención para verificar el estado de salud y las condiciones en las que se encuentra Cordero.
“Mis primos Allan y Marcela, son personas honestas y trabajadoras, no son delincuentes, no participan en política y juntos tienen unas gemelitas de sólo 4 años que están ahorita conmigo. Esta mañana se los llevaron arrastrados de Camino de Oriente y están presos en el Chipote. Estaban allí junto a muchos esperando que saliera la marcha azul y blanco”, aseguró Nadia Vado en sus redes sociales.
Gobierno de Costa Rica llama al cese de la represión
El Gobierno de la República de Costa Rica hizo un llamado, al cese inmediato de la represión y las detenciones arbitrarias. Así mismo, pidió respetar el derecho legítimo a la protesta, a la libertad de expresión, a la reunión pacífica y a la participación política de la población.
La Policía Orteguista informó mediante comunicado que realizó 38 detenciones en el sector de Camino de Oriente. Los arrestos ilegales se dieron con lujo de violencia y desproporción. Un día antes la PO amenazó con reprimir y encarcelar a los manifestantes que no tuvieran permiso previo de ellos para manifestarse, violando el derecho constitucional de reunión pacífica.