Los familiares de los pobladores que se encuentran huyendo de la represión orteguista en la Isla de Ometepe, en Rivas, se encuentran preocupados por las condiciones en las que estos se encuentran, ya que están en la intemperie debido a la persecución.
“Ellos están pasando hambre, durmiendo mal, porque los familiares a cómo podíamos les llevábamos comida. Pero ahora la Policía está revisando a todos los campesinos que suben a las laderas de los volcanes a ver sus cultivos, y hasta ya tienen identificados quienes tienen sembrado en las faldas del volcán y solo a ellos los dejan pasar”, comentó un poblador de Altagracia que tiene dos familiares huyendo de la represión policial.
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Según este poblador, el martes fue el último día que pudieron llevar comida porque toda la zona está vigilada por agentes policiales, antimotines y paramilitares del gobierno, detalló.
Indicó que la Policía Orteguista está usando perros para buscar a los isleños refugiados en el volcán Concepción, de de 1,610 metros de altura y de 36 kilómetros de diámetro, “pero hasta el momento se conoce que solo dos han podido secuestrar a dos; uno es Carlos Roberto Cajina y otro muchacho que no le sé el nombre que dicen que estaba golpeado”, expresó el ciudadano.
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El mismo ciudadano manifestó que no saben cuántos isleños están escondidos en las faldas del volcán Concepción, debido que varios han logrado huir, en pangas, hacia el sector fronterizo con Costa Rica. “También la Policía y los políticos sandinistas de Ometepe andan presionando a los dueños de pangas, para que no hagan viajes nocturnos, y les han advertido que caerían presos por cómplices del terrorismo”, apuntó el poblador.
No saben nada de sus familiares
“La preocupación que nosotros tenemos es que no sabemos nada de nuestros familiares, si están bien, si están vivos, o están presos. Esto es terrible lo que estamos viviendo, fíjese que la familia de Carlos Roberto Cajina, al que agarraron el martes en un champa en las laderas del volcán Concepción, todavía no saben nada de él, porque no tienen dinero para andarlo buscando por todos lados” explicó una pobladora de Altagracia, que por temor a ser perseguida, no quiso identificarse.
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La represión en Ometepe inició el sábado 6 de octubre, cuando miembros del Movimiento 19 de abril convocaron a una carrera ciclística por la libertad de los presos políticos, y la Policía de Altagracia por tener pocos agentes no pudo impedir la manifestación pacífica y pidieron refuerzos a la sede departamental de la Policía de Rivas.
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Los primeros antimotines llegaron al municipio de Altagracia a las 6:00 p.m. y por la noche iniciaron la cacería de autoconvocados isleños, logrando la captura de los primeros cuatro isleños en la madrugada del domingo 7 de octubre. La represión continuó el lunes 8, cuando dispararon a la casa de la familia Cruz Alemán, e hirieron de cuatro balazos a Max Cruz Gutiérrez y también se llevaron a su esposa Marbely Alemán. Los isleños trataron de resistirse, y hasta un policía resultó con heridas en la cabeza, pero ante los disparos, optaron por huír.