Mientras continúa la persecución y detención de la Policía Orteguista contra los ciudadanos que participaron en las marchas y otras actividades de resistencia cívica en la isla de Ometepe, el turismo agoniza ante la ausencia de viajeros nacionales y principalmente extranjeros, lo cual ha forzado a los propietarios de pequeños negocios a cerrar.
Otros propietarios de hoteles, hostales y restaurantes tratan de sortear la crisis rebajando hasta en 70 por ciento los precios ante la notoria ausencia de turistas extranjeros a los muelles de Moyogalpa y Altagracia.
“Aunque sea solo para pagar el recibo de agua y luz”, sentenció una dueña de restaurante ubicado en el municipio de Moyogalpa.
Los turistas huyeron espantados
Antes de abril en la isla sobraban visitantes, de los ferris se miraba a diario bajar un hormiguero de turistas nicaragüenses, estadounidenses y europeos, y a lo largo de la carretera que bordea todo Ometepe se les miraba ir en carros, motocicletas y bicicletas.
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Ahora solo se ven a los locales bajo el sol de estos días en sus actividades cotidianas o sentados en sus negocios esperando a los turistas.
“Es difícil que vengan turistas y más los extranjeros sabiendo que en la isla de Ometepe ya no hay esa tranquilidad de antes, que la Policía persigue a los manifestantes y que desde hace varias semanas hay presencia de paramilitares, que andan en camionetas rondando junto a los policías”, explica un ciudadano que tiene un negocio de comida en el municipio de Altagracia.
Tanto en Moyogalpa como en Altagracia es frecuente ver hoteles y hostales, casas particular convertidas en restaurantes o comiderías, aprovechando el boom turístico de la isla; pero en estos últimos tiempos la mayoría permanece cerrado por la situación de tensión e inseguridad.
Cierre de negocios
Un propietario de restaurante que omitió su nombre por temor a represalias, explicó a LA PRENSA que ha conocido casos de cierres definitivos de hospedajes y restaurantes, cuyos dueños eran extranjeros optaron por salir.
“La crisis actual que atraviesa la isla, ver a los policías que andan en cacería junto a paramilitares ha ahuyentado a los turistas y si estos no vienen nosotros no ganamos, más bien perdemos. El Ometepe de ahora se parece al de 35 años atrás, donde el turismo no era su fortaleza”, indicó el empresario.
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Sobre la situación actual de Ometepe, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se pronunció este lunes 22 de noviembre.
A través de Twitter escribió que “recibe con inquietud información sobre operativos policiales y detenciones en Ometepe y alrededores de la isla, y recuerda al Estado de Nicaragua que la protesta social no debe ser criminalizada porque constituye un derecho reconocido en el sistema interamericano”.
LA PRENSA ha podido constatar en el sitio, que la presencia policial ha disminuido en relación a las primeras denuncias de secuestros y represión.
Los paramilitares que llegaron en los barcos desde Rivas se han ocultado y según denuncias, andan de civiles en los caceríos en labores de espionaje, mientras las incursiones policiales a las montañas en busca de personas ocultas se realizan de noche con perros y drones, mientras patrullan las costas para evitar que escapen en pangas o botes, según notifican a LA PRENSA los pobladores bajo condición de anonimato.
Disparos en la selva
El grito de los monos aulladores, el trinar de gran variedad de aves, está siendo sustituido por detonaciones de AK47 disparados por agentes policiales y paramilitares, interrumpiendo la paz única que durante los últimos años fue parte del atractivo de miles de turistas nacionales y extranjeros que visitaban esta isla de agua dulce.
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De acuerdo con un poblador al que identificaremos únicamente como Pedro, los armados del gobierno, no solo recorren el trayecto entre Altagracia y Moyogalpa cada dos horas, sino que las patrullas y las hilux, están llegando a dar vueltas a todas las comunidades aledañas al volcán Maderas.
“Ayer (el domingo) anduvieron los paramilitares y policías por la zona de Mérida, parece que los sapos les han informado que en el volcán Maderas están escondidos algunos opositores, y los andan buscando, dicen que hasta un antimotín se fracturó una pierna y lo sacaron por el lado de San Pedro, la ambulancia pasó a traerlo como a las dos de la tarde de ayer (domingo), pero no le puedo asegurar que fue lo que pasó, yo si vi pasar la ambulancia” comentó Pedro.
En “deuda” con la promesa al dictador
Según este poblador, los militares del gobierno no han podido cumplir con su meta de capturar a más de 40 campesinos, que han participados en protestas y que eran parte del Movimiento Anticanal, porque ellos no pueden escalar esos dos volcanes, ahí solo gente especializada sube “y nosotros los isleños podemos subir, porque hasta sembramos en esos volcanes, por eso es que andan volando balazos como locos” adujo.
Pedro narró que unos 20 antimotines, llegaron al sector de la Peña de El Quino, y estuvieron disparando, en la tarde del domingo.
“Parece que ellos creen que hay gente oculta en esas montañas y al disparar piensan que van a ver salir corriendo a alguien, pero con eso a los que han corrido son a los turistas, aquí ya no viene nadie, hasta el Ojo de agua y todos los hoteles, cerraron operaciones por falta de turistas”, indicó.
Uno de los pueblos indígenas de Ometepe conocido como Urbaite, ha sido el blanco de los operativos militares, debido a que la mayoría de estos pobladores se volcaron contra el gobierno y se sumaron activamente a todas las protestas autoconvocadas de la isla, precisó el ciudadano.
Ya quedan pocos escondidos
Uno de los dirigentes opositores de Ometepe, explicó que la población isleña se encuentra a punto de ganar esta batalla, al evitar ser secuestrados masivamente como pretendía la Policía Orteguista.
“Toda la gente que se refugió en los dos volcanes y montañas de Ometepe, se han logrado escapar por las noches y salir de la isla, creemos que ya solo quedan unos 20 por escaparse de la represión Orteguista, lo que significa que los isleños vamos ganando esta batalla, porque no nos han podido secuestrar a todos como ellos querían”, argumentó el dirigente que pidió omitiéramos su nombre por seguridad.
Cultivos abandonados
Muchos de los campesinos isleños que huyen de la represión policial, tuvieron que dejar abandonados sus cultivos desde hace 16 días, mientras que otras plantaciones de granos básicos son dañados por los agentes policiales y paramilitares que les pasan encima, cuando pasan corriendo montaña adentro buscando a los autoconvocados por todas partes, como aguja en un pajal, detalló el dirigente opositor isleño.
“Los paramilitares y policías, andan lista de la gente que van a detener, y en los puertos, ellos están pidiendo cédula y requisando a todo el que entra y sale de Ometepe, a una señora que no traía cédula no la dejaron viajar, esto está terrible, y no sabemos cuánto tiempo van a estar esos guardias aquí, nos espantaron el turismo, nos roban lo que les da la gana, Ometepe ya no es el oasis de paz, sino la isla del descontento popular” finalizó el dirigente opositor isleño.
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