Como “grave” y “preocupante” valoró la directora del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Vilma Núñez, la capacitación militar que ha estado celebrando la Policía Orteguista (PO), institución que es considerada por la población como el órgano represor de las protestas pacíficas y que actúa bajo órdenes de la dictadura Ortega-Murillo.
Francys Valdivia, presidenta de la Asociación Madres de Abril (AMA), expresó que el entrenamiento a los oficiales de la PO refleja la política de represión en Nicaragua por parte del “gobierno”. Dicha política implica evitar cualquier manifestación y seguir con la persecución contra la población en todo el territorio nacional.
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Según una nota de prensa publicada en el portal de la PO sobre la clausura del Séptimo Concentrado Táctico Policial Militar “Teniente Gabriel de Jesús Vado”, el inspector general de la PO, Jaime Vanegas, expresó que no se preparan para atacar a nadie y tampoco para reprimir.
“Esta preparación no es para ir a atacar a nadie, ni para ir a reprimir a nadie, es para defendernos en nuestras delegaciones, en nuestras unidades policiales, para defendernos a nosotros mismos y defender al pueblo heroico”, indicó.
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Sin embargo, Vanegas pareciera cambiar de opinión de un momento a otro, ya que en la promoción de otro grupo de más de doscientos oficiales del Concentrado Táctico Policial Militar “Teniente Jean Kerry Luna”, el pasado 10 de noviembre, destacó el actuar policial contra las protestas por la fallida reforma a la seguridad social. En el segundo día de estas, se contaron los primeros tres muertos de una lista de más de quinientos, después de 209 días del estallido social.
“Tiene un gran significado para nosotros como institución policial que se lleve a efecto esta clausura, con 209 miembros, sabemos que estos días fueron muy difíciles, en un terreno en el que no estamos acostumbrados habitualmente a actuar, pero sabemos que contamos con el compromiso de ustedes, con su heroísmo, el mismo que demostraron en abril de este año, con el intento golpe de Estado, trabajando arduamente en el restablecimiento del orden público, la libre circulación de las personas y vehículos, protegiendo a las familias nicaragüenses”, expresó Vanegas.
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La libre circulación a la que se refiere Vanegas fue la excusa para implementar la “operación limpieza”, en la que la PO actuó en equipo con paramilitares, quienes entraban a las ciudades descargando sus armas, engrosando la lista de víctimas mortales de la dictadura Ortega-Murillo.
Para Núñez, esta preparación policial podría tener dos intenciones: una, seguir amedrentando, “metiendo en miedo e inmovilizando a la población”, y la segunda, que en definitiva, estén entrenando para atacar militarmente, lo que implicaría no solo una agresión contra la población, sino una violación de la Constitución de la República y las mismas normas de la PO, ya que dicha institución no es un organismo militar.
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Para la defensora de derechos humanos, el mismo Daniel Ortega sabe que aunque ha implementado medidas represivas y violatorias con el fin de evitar la manifestación pacífica, el descontento y el empeño de los nicaragüenses por recobrar la libertad y la liberación de los presos políticos no han terminado, y en cualquier momento pueden surgir nuevos métodos y formas de lucha enmarcados en el aspecto cívico.
“Él no ha podido de ninguna manera detener, totalmente, entonces, ahora cree que amenazando con una agresión militar lo va a conseguir, entonces eso definitivamente es parte del miedo, y es parte de su empeño por seguir controlando todo lo que pasa”, expresó.
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Desde que iniciaron las protestas contra el régimen de Ortega-Murillo, se han contabilizado hasta 535 muertos, según organismos de derechos humanos. También se han multiplicado las denuncias de torturas por parte de la institución policial contra presos políticos, así como el aumento de secuestros y la represión contra cualquier persona que piense diferente al régimen.
Policía Orteguista debe ser renovada
Francys Valdivia, presidenta de la Asociación Madres de Abril (AMA), considera que la Policía Orteguista (PO) debe reflexionar sobre su actuar, pues los gobiernos se van y la Policía se queda; pero en el caso de Nicaragua, no aplica con la Policía opresora. “Se requiere de una policía profesional, especializada y ética”, expresó.
Valdivia refirió que la solución a la crisis que vive el país debe ser pacífica, ya que Nicaragua no ha respondido ni responderá con violencia, siguiendo el ejemplo de los universitarios, portando la bandera azul y blanco.
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