14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Dagoberto Arias, socio director de Deloitte

Auditoría y automatización

En la era digital en que vivimos, los procesos de robótica están ganando terreno y los profesionales que trabajan en contabilidad y auditoría debemos conocerles y adaptarnos al cambio, el cual origina, por supuesto una forma diferente de hacer nuestro trabajo, con mayores niveles de eficacia

En la era digital en que vivimos, los procesos de robótica están ganando mucho terreno y los profesionales que trabajamos en áreas de contabilidad y auditoría debemos conocerles y adaptarnos al cambio, el cual origina, por supuesto una forma diferente de hacer nuestro trabajo, con mayores niveles de eficacia.

Existen herramientas que realizan las actividades que hasta hoy han ejecutado las personas como parte de un proceso, con el beneficio de ejecutar actividades repetitivas más rápidas y precisas que las personas.  Algunos quizás podrían temer que su trabajo esté amenazado por robots, pero hay que tener claro que el papel de los profesionales en la contabilidad y la auditoría está cambiando y adaptarse a esta era digital, les permitirá dedicar tiempo a análisis más relevantes y de toma de decisiones.

Lea también: Camino hacia una nueva empresa

Actualmente, las principales firmas internacionales cuentan con herramientas automatizadas para brindar servicios de impuestos, asesorías y auditoría. Por ejemplo, una parte significativa de las actividades fiscales, como el cálculo de las diferencias entre las bases fiscales y financieras y la preparación de declaraciones han sido automatizadas con éxito. También la ejecución de auditorías en áreas como ingresos se han automatizado mediante robots de software que realizan funciones basadas en reglas para ejecutar conciliaciones, procedimientos analíticos y procedimientos de doble propósito (por ejemplo, pruebas de control interno y pruebas de detalles).

Los ingresos son generalmente un área de alto riesgo en los trabajos de auditoría y la automatización de las tareas que no requieren el criterio del auditor, tiene el potencial de mejorar la calidad de la auditoría al reasignar el trabajo de los auditores al análisis de las diferencias generadas por los resultados obtenidos por el trabajo ejecutado a través de la robótica.

Puede leer también: Inteligencia Artificial: hacia una metamorfosis financiera

Estas herramientas también permiten verificar la transferencia segura de archivos por parte del cliente y que se origina directamente de los sistemas de información contable; otras herramientas toman las ventas de periodos anteriores, las comparan con el costo de ventas y permiten establecer una tendencia para el año actual, el cual se compara contra las ventas reales para determinar si son razonables considerando el umbral de la materialidad.

Al automatizar estos y otros procedimientos, los auditores pueden reasignar su tiempo a más actividades de valor agregado, lo que inherentemente aumentará la calidad de la auditoría y el servicio al cliente. Así, los auditores pueden obtener una mejor comprensión de las operaciones comerciales del cliente, y por lo tanto, ser capaces de evaluar con mayor precisión el riesgo de error material.

También puede leer: ¿Está preparado para trabajar con inteligencia artificial?

También hay que tener presente que esta era digital ha venido a cambiar el modelo tradicional de auditor. El auditor del futuro debe ser un profesional con un fluido manejo de la tecnología, una gran capacidad de análisis de datos y un amplio sentido de cooperación para con sus equipos.

El autor es Socio Director de Deloitte Nicaragua

Economía Deloitte Hablemos de Negocios archivo

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí